Al final de una larga reunión del consejo de administración celebrada el domingo, TIM también dijo que exploraría una posible unión con su rival de banda ancha, Open Fiber, respaldada por el Estado, mientras sigue adelante con la renovación interna que su nuevo director general, Pietro Labriola, presentó a principios de marzo.

El analista de Banca Akros, Andrea Devita, dijo que se trataba de un "resultado positivo, que aumenta las probabilidades (recientemente consideradas bastante bajas) de que la oferta se acabe concretando (suponiendo que la actitud de KKR no haya cambiado)".

KKR declinó hacer comentarios.

Las acciones de TIM han perdido aproximadamente un 30% de su valor en lo que va de año, alcanzando un mínimo histórico, a medida que se desvanecían las expectativas de que la propuesta de adquisición de KKR se materializara.

La renovación interna de Labriola, que dio a conocer junto con una pérdida récord para 2021, no ha logrado impulsar las acciones.

A las 0843, las acciones subían un 9,2% a 0,315 euros cada una, frente a una subida del 1,4% del índice de referencia italiano

KKR pretende hacerse con el control del antiguo monopolio telefónico, cargado de deudas, y tratar de relanzarlo escindiendo sus activos de infraestructura de red, según han dicho previamente algunas fuentes.