Los mercados inmobiliarios comerciales de Estados Unidos y Europa están inmersos en la mayor ralentización desde la crisis de 2008-9.

"Los efectos adversos sobre las valoraciones de unos tipos de interés más altos y el descenso estructural de la demanda de oficinas y locales comerciales pueden desencadenar impactos más amplios, dada la importante exposición de los balances de los prestamistas bancarios y no bancarios al sector", afirmó el banco en su informe anual 2023 publicado el jueves.

UBS dijo que su exposición de riesgo al sector en todo el grupo aumentó a 55.090 millones de dólares en 2023 desde los 47.100 millones de 2022, en gran parte debido a la adquisición de su rival Credit Suisse. Varios otros grandes bancos europeos tienen mayores exposiciones de préstamos a bienes inmuebles comerciales, según muestran los datos oficiales.

UBS define los "riesgos principales y emergentes" como aquellos que tienen el potencial de materializarse en el plazo de un año y podrían afectar significativamente al grupo. Otros riesgos detallados el jueves fueron la inflación y la geopolítica.

El sector inmobiliario comercial no figuraba entre los principales riesgos que UBS señaló en su último informe anual.

El banco no ofreció un desglose que mostrara su exposición al sector inmobiliario comercial estadounidense, un mercado que ha sufrido especialmente.

Las valoraciones se han desplomado allí, presionando a los promotores endeudados y a algunos bancos regionales estadounidenses, así como a los prestamistas alemanes especializados fuertemente expuestos.

Los analistas han afirmado que el golpe que supondría una nueva recesión para los principales bancos a nivel mundial debería ser manejable, con un pequeño impacto en sus beneficios.

El Fondo Monetario Internacional dijo el jueves que los bancos debían estar atentos a los riesgos inmobiliarios en Suiza.

"El sector financiero es resistente con fuertes amortiguadores, pero persisten las vulnerabilidades del sector inmobiliario", dijo el FMI tras concluir su revisión de la economía suiza.

En su informe anual, UBS afirmó que la mayor exposición al sector inmobiliario comercial suizo también había incrementado los riesgos de transición relacionados con el clima.

Ello se debe a que Suiza aprobó el año pasado la Ley sobre el Clima y la Innovación, que afectará a las normas de eficiencia energética, según el banco.

Los prestamistas están intentando reducir las emisiones vinculadas a sus préstamos inmobiliarios, una de las principales fuentes de emisiones de carbono.

Algunos ejecutivos de bancos europeos han pedido a los gobiernos que endurezcan las normas relativas a la descarbonización del sector inmobiliario, advirtiendo de que sin ello tendrán dificultades para alcanzar los objetivos climáticos.

UBS dijo el jueves que se proponía una reducción del 45% de las emisiones vinculadas a su cartera inmobiliaria residencial suiza para 2030 y del 48% para su negocio comercial.

(1 dólar = 0,9269 euros)