1 de agosto - VF Corp recortó el martes su previsión de ingresos anuales, señalando una ralentización de la demanda de sus prendas de vestir y zapatillas deportivas por parte de los consumidores preocupados por el precio, especialmente en Norteamérica.

Con la Reserva Federal subiendo aún más los tipos de interés para combatir la alta inflación, las carteras de los consumidores, ya de por sí encogidas, han provocado que los compradores se alejen de los productos más caros y gasten sus dólares principalmente en artículos de primera necesidad.

Esto también ha obligado a mayoristas como Foot Locker e Hibbett a recortar pedidos, ya que siguen luchando con el exceso de inventario y están ofreciendo grandes descuentos para atraer a los clientes.

Las ventas en América, el mayor mercado de VF Corp, cayeron un 15% en el trimestre de referencia. Sin embargo, en la Gran China, las ventas aumentaron un 24% gracias a un repunte de la demanda que impulsó el gasto de los consumidores tras el levantamiento de las restricciones de la COVID-19.

"Hay problemas con la propia marca en la venta al por mayor y parece que también los hay en el segmento directo al consumidor", afirmó Jessica Ramírez, analista principal de Jane Hali & Associates.

Las zapatillas de la empresa no están resonando realmente entre los consumidores como solían hacerlo y da la sensación de que su estrategia general se ha quedado atrás, dijo.

VF Corp, con sede en Denver (Colorado), registró una caída del 6% y del 22% en sus marcas Timberland y Vans, respectivamente, mientras que la marca The North Face experimentó un aumento del 12%.

Ha aumentado la actividad promocional en un intento de descargar el exceso de inventario y estimular la demanda. El resultado fue que su margen bruto ajustado para el primer trimestre se situó en el 52,8%, 130 puntos básicos menos.

La empresa pronosticó unos ingresos anuales de entre planos y estables para el año, frente a una previsión anterior de entre planos y ligeramente al alza.

VF Corp mantuvo su previsión de beneficios anuales de 2,05 a 2,25 dólares por acción. También registró una pérdida ajustada por acción en el primer trimestre mayor de lo esperado, de 15 céntimos, frente a una estimación de 11 céntimos.

Los ingresos del primer trimestre cayeron un 8%, hasta los 2.090 millones de dólares en el trimestre finalizado el 1 de julio, superando la estimación media de los analistas de 2.070 millones de dólares, según datos de Refinitiv.

Las acciones de la empresa subieron marginalmente en las operaciones posteriores a la comercialización. (Reportaje de Ananya Mariam Rajesh en Bengaluru; Edición de Pooja Desai)