METTLACH (dpa-AFX) - El fabricante de cerámica Villeroy & Boch siente cada vez más los efectos del debilitamiento de la economía, sobre todo en el sector de la construcción. En los nueve primeros meses del año fiscal, las ventas y los beneficios cayeron significativamente, según anunció el viernes la empresa con sede en Mettlach, en el Sarre.

Con 650,6 millones de euros, los beneficios fueron un 10,7% inferiores a los del año anterior. Esto se debió principalmente al débil desarrollo en Europa Central. "La economía alemana se debilitó más que la de la zona euro debido a la elevada inflación y al débil desarrollo económico mundial", declaró.

El beneficio antes de intereses e impuestos (Ebit) cayó un 11,7% interanual, hasta 56,8 millones de euros, en los tres primeros trimestres. Debido al empeoramiento de las perspectivas económicas, la empresa familiar ya había rebajado en julio sus previsiones para todo el año. Se espera que la facturación sea entre un tres y un seis por ciento inferior a la del año anterior, y que el EBIT caiga entre un cinco y un diez por ciento. La previsión se reducirá aún más, hasta situarse en la franja inferior, según ha declarado.

En 2022, Villeroy & Boch alcanzó unas ventas de 994,5 millones de euros. El Ebit ascendió a 96,8 millones de euros, con un beneficio por debajo de la línea de 71,5 millones de euros. A 30 de septiembre, la empresa contaba con 6080 empleados en todo el mundo, unos 300 menos que un año antes.

En septiembre, la empresa anunció la adquisición del fabricante belga de grifería y sanitarios Ideal Standard Group. El cierre de la operación está previsto para principios de 2024, a reserva de las autorizaciones reglamentarias.