El asesor de política industrial de China y "padre de los VE", Wan Gang, afirmó que unas baterías eficientes, unas mejores arquitecturas para los VE y unos sistemas de conducción inteligentes son la clave para el escalado de los VE, y pidió la colaboración internacional en investigación y normas.

Wan, presidente del Congreso Mundial de Vehículos de Nuevas Energías de China (WNEVC) que se celebra en Múnich, afirmó que los vehículos híbridos y de pila de combustible propulsados por hidrógeno son una parte esencial de la transición hacia una movilidad con bajas emisiones de carbono.

"Muchos de ustedes tienen mucha curiosidad por conocer el punto de vista chino sobre las pilas de combustible... el hidrógeno es un componente importante del sistema energético nacional", afirmó, añadiendo que la tecnología era especialmente prometedora para reducir las emisiones de los vehículos comerciales.

"Tenemos que promover toda la cadena de suministro del desarrollo con bajas emisiones de carbono", añadió.

Los medios de comunicación estatales chinos suelen referirse al ex ministro de Ciencia como el "padre de los vehículos eléctricos" por su papel a la hora de instar al gobierno chino a invertir fuertemente en vehículos de bajas emisiones.

Tras 15 años en Alemania estudiando y trabajando en Audi, de Volkswagen, regresó a China en el año 2000 para dirigir una iniciativa impulsada por el gobierno para desarrollar el mercado de los VE.

La experiencia en Alemania "me ayudó a comprender cómo las empresas lograban innovaciones tecnológicas y su aplicación", declaró Wan, dirigiéndose a los principales ejecutivos del sector automovilístico y funcionarios de la industria alemana en la inauguración del WNEVC.

La decisión de celebrar la WNEVC en Múnich, la primera vez que la conferencia se celebra en el extranjero, se considera un símbolo de la intención de la industria china del VE de expandirse en Europa, desafiando a los fabricantes de automóviles europeos que empezaron a invertir más tarde en la electrificación.

Aún así, los fabricantes chinos de VE presentes en la conferencia de Múnich dijeron a Reuters que les interesaba colaborar con los fabricantes de automóviles alemanes, aprovechando su escala, marca e inversiones para reducir costes y sobrevivir en un mercado competitivo abarrotado de recién llegados.