Los comentarios fueron los primeros del organismo de crushing y exportación CIARA-CEC, que representa a las principales firmas de granos en Argentina, incluyendo a Cargill y Bunge, desde la elección del outsider libertario Milei el domingo. Tomará posesión de su cargo el 10 de diciembre.
Argentina es normalmente el primer exportador mundial de soja procesada y está entre los tres primeros de maíz. El país sudamericano es también un importante proveedor de trigo y carne de vacuno.
"Hoy el comercio de granos está paralizado por la escasez de granos, la peor en 60 años, y por la expectativa tras la victoria de Milei de que pronto habrá un ajuste del tipo de cambio oficial", dijo a última hora del miércoles Gustavo Idigoras, titular de CIARA-CEC.
Argentina, que lucha contra una inflación de tres dígitos y un deslizamiento de la moneda, tiene estrictos controles de capital que han llevado a tipos de cambio paralelos de hasta 1.000 pesos por dólar, muy lejos del oficial de poco más de 350 pesos. Eso perjudica a los exportadores, que a menudo tienen que devolver al país la mayor parte de sus ventas al exterior al tipo oficial, obteniendo menos pesos por cada dólar.
Aunque el gobierno ha puesto en marcha mecanismos para endulzar el tipo de cambio a los agricultores, ofreciéndoles una tasa mejor, muchos productores esperan a ver qué hace Milei cuando asuma el cargo. Ha prometido eliminar los controles de divisas y recortar los impuestos.
Idigoras dijo que la falta de frijoles para las enormes plantas de trituración que convierten la soja en aceite y harina a lo largo del río Paraná significaba que las instalaciones estaban funcionando a una capacidad muy reducida.
"Hoy estamos a un 73% de capacidad media ociosa en las plantas de trituración y a un 75% de capacidad ociosa en los puertos cerealeros", dijo. "Estamos atravesando el peor año y el peor trimestre de la historia".
Añadió que las plantas de trituración estaban adelantando paros por mantenimiento técnico ante la "imposibilidad" de poder seguir operando.
"La mayoría de ellas ya están activando estas paradas técnicas en muchas líneas de producción. En los próximos meses quedarán muy pocas líneas de producción activas", afirmó.
Idigoras hizo un llamamiento al gobierno de Milei para que elimine rápidamente las restricciones comerciales sobre los cereales, incluidos los impuestos, y el acceso a las divisas, y para que levante los topes a las exportaciones y los trámites burocráticos para las licencias de importación.
"El gobierno de Milei debe ser el gobierno que tenga la mayor orientación exportadora de la historia, una política exportadora agresiva. Para ello deben eliminar primero todas las restricciones el primer día".
