Los inversores extranjeros están inyectando más dinero en el sector financiero de Brasil al tiempo que se alejan de las empresas mineras y siderúrgicas, según mostró el lunes un estudio realizado por el operador bursátil B3 y la empresa de análisis Neoway.

Entre los 11 sectores analizados, el de materiales básicos fue el único que registró un saldo neto negativo de inversiones extranjeras en 2022 y en lo que va de año. Entre ellos se encuentran los mineros, los siderúrgicos, los fabricantes de pasta de papel, las empresas papeleras y los productores petroquímicos. Los analistas citaron la caída de los precios del mineral de hierro y la ralentización de China, segunda economía mundial y gran cliente de las materias primas procedentes de Brasil.

Los inversores internacionales tienen una enorme influencia en las fluctuaciones del mercado de renta variable de Brasil, ya que representan más de la mitad del volumen anual de operaciones en la bolsa del país sudamericano.

Según el estudio, los materiales básicos se convirtieron en el foco de los vendedores de acciones en el último año y medio, registrando un saldo negativo de 5.500 millones de reales (1.110 millones de dólares) el año pasado y de 13.700 millones en 2023 a finales de junio.

Ese movimiento invirtió una tendencia positiva para la inversión en esas empresas en 2020 y 2021. En 2020, materiales básicos y petróleo, gas y biocombustibles fueron los únicos sectores con entradas positivas. En 2021, fueron los materiales básicos y la tecnología de la información.

"Es China y el mineral de hierro", dijo Lucas Laghi, analista de XP Investimentos, cuando se le preguntó por las razones de la nueva tendencia.

Los precios del mineral de hierro subieron entre 2019 y 2020, pero perdieron fuelle a mediados de 2021 y se han mantenido en un rango desde entonces, afectados por factores contradictorios como la recuperación económica de China y la debilidad del sector inmobiliario de ese país.

Estos factores tienen un gran impacto en el mercado bursátil brasileño, ya que empresas como el gigante minero Vale representan casi el 15% del índice bursátil de referencia de Brasil, el Bovespa.

Los inversores extranjeros han movido más dinero hacia los valores financieros de Brasil, un sector que incluye bancos, operadores de centros comerciales y compañías de seguros.

Tras registrar el mayor saldo negativo entre todos los sectores entre 2019 y 2021, el financiero tuvo la segunda mayor entrada neta el año pasado, con 20.800 millones de reales, sólo por detrás del petróleo, el gas y los biocombustibles, que acumularon 22.500 millones de reales.

En el primer semestre de 2023, el sector financiero alcanzó el mayor saldo neto, con un total de 11.300 millones de reales en el periodo.

En el conjunto del mercado bursátil, según el estudio de Neoway, el saldo de las inversiones extranjeras alcanzó un valor negativo de 39.200 millones de reales en 2020, antes de reducir la pérdida en 2021 y volverse positivo el año pasado.

En los seis primeros meses de 2023 se registró un saldo positivo de 17.300 millones de reales.

(1$ = 4,9700 reales) (Reportaje de Andre Romani; Reportaje adicional de Patricia Vilas Boas; Redacción de Gabriel Araujo; Edición de David Gregorio)