El yen japonés cotizaba a 158,05 por dólar, subiendo casi un 0,2% en unas operaciones tranquilas con los mercados de Tokio cerrados por el primero de los días festivos de la Semana Dorada del país.
El viernes se había movido casi 3,5 yenes entre los 158,445 y los 154,97, mientras los operadores descargaban su decepción después de que el Banco de Japón mantuviera sin cambios la configuración de su política monetaria y ofreciera pocas pistas sobre la reducción de sus compras de deuda pública japonesa (JGB), una medida que podría haber puesto un suelo bajo el yen.
La revisión de la política de la Reserva Federal del 1 de mayo es el principal foco de atención para los mercados esta semana, con los inversores anticipando ya un retraso en sus recortes de tipos tras una tanda de inflación pegajosa en EE.UU. y mientras los funcionarios, incluido el presidente Jerome Powell, enfatizan que incluso esos planes dependen de los datos.
Vishnu Varathan, jefe de economía y estrategia para Asia del banco Mizuho de Singapur, prevé que el par dólar-yen experimente más movimientos de ida y vuelta hasta la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), a diferencia de las últimas semanas, en las que las expectativas halconas de la Fed habían mantenido al dólar en constante alza frente a la mayoría de las demás divisas.
"El listón está bastante alto para una sorpresa halcón sostenida, que a su vez elevaría los rendimientos", dijo refiriéndose a la Fed.
"Así que, desde la perspectiva del diferencial de rendimientos entre los bonos del Tesoro de EE.UU. y los JGB, para que eso siga alimentando una mayor depreciación del yen, el listón está realmente alto porque puede que la Fed tampoco se esté inclinando tan halconesamente como esperan los mercados".
"La decepción del Banco de Japón podría transcribirse al Comité Federal de Mercado Abierto en la medida en que puede que se muestren más indecisos que decididamente halcones".
Se prevé que la Fed mantenga su tipo de interés de referencia estable en el 5,25%-5,5% en la reunión del 30 de abril al 1 de mayo. Los inversores ven ahora quizá un único recorte este año, actualmente previsto para noviembre, según la herramienta FedWatch de la CME.
Los mercados también están en guardia ante cualquier intervención de las autoridades japonesas para contener la caída del yen de casi un 11% este año.
Aunque el yen registró el viernes su mayor caída en seis meses, también subió brevemente hasta 154,97 por dólar, lo que desató las especulaciones de que las autoridades japonesas podrían haber revisado los tipos de cambio antes de una probable intervención. No quedó claro de inmediato cuál fue la causa del movimiento.
La libra esterlina cotizaba a 1,2509 dólares, un 0,15% más, pero aún a cierta distancia de los máximos del viernes de 1,2541 dólares.
