Por Ann Saphir

5 jul (Reuters) - Las autoridades monetarias de la Reserva Federal obtuvieron el viernes más pruebas del enfriamiento del mercado laboral, lo que podría fortalecer su confianza en que están ganando la batalla a la inflación y abrir el camino a un debate más activo sobre los recortes de las tasas de interés cuando se reúnan este mes.

El informe mensual del Departamento de Trabajo mostró que la tasa de desempleo subió al 4,1% en junio y las grandes revisiones de las estimaciones de creación de empleo del mes anterior hicieron que el aumento medio mensual de las nóminas en los tres últimos meses se redujera a 177.000.

Esta cifra se sitúa por debajo de los 200.000 empleos mensuales que, según la reciente estimación de la gobernadora de la Fed, Lisa Cook, la economía necesita crear para seguir el ritmo de la inmigración y otros aumentos de la población.

Los ingresos medios por hora crecieron un 3,9% respecto al año anterior, según el informe, menos que el 4% por primera vez en tres años, lo que indica que la presión sobre los precios está disminuyendo.

No se espera que los banqueros centrales estadounidenses, que se reunirán el 30 y 31 de este mes, modifiquen la tasa oficial, que se encuentra en el 5,25%-5,5% desde julio pasado.

No obstante, los nuevos datos, junto con otros recientes, que sugieren que la inflación se está enfriando, y la economía se está desacelerando, podrían poner en su punto de mira un recorte de tasas en la siguiente reunión.

"En general, la moderación de las nóminas en el segundo trimestre, junto con el aumento de la tasa de desempleo y la ralentización del crecimiento que sugieren los últimos datos, refuerzan la posibilidad de recortar las tasas este año", dijo Rubeela Farooqi, de High Frequency Economics. "Creemos que la Fed podría sin duda iniciar el debate sobre el recorte en la próxima reunión del FOMC, y bajar el tipo oficial en septiembre, si los datos siguen mostrando moderación".

Los responsables de política de la Fed indicaron en su reunión de junio que esperan solo una baja de tasas este año, una previsión que apuntaba a un inicio en diciembre de cualquier flexibilización política.

El presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo que necesitarían estar seguros de que la inflación se dirige a su objetivo del 2% antes de recortar las tasas, además indicó que cualquier debilitamiento inesperado del mercado laboral podría desencadenar una rebaja.

"Ahora tenemos pruebas definitivas del enfriamiento del mercado laboral estadounidense, con un aumento algo alarmante de la tasa de desempleo en los últimos meses que debería dar a los responsables políticos 'más confianza' en que la inflación al consumo volverá pronto al objetivo del 2% de forma sostenible", señaló Scott Anderson, de BMO.

(Reporte de Ann Saphir, Howard Schneider, Michael S Derby; editado en español por Carlos Serrano)