TOKIO, 16 ene (Reuters) - La inflación mayorista japonesa se mantuvo estable en diciembre con respecto al año anterior, ralentizándose por duodécimo mes consecutivo, lo que subraya la opinión del banco central de que la presión sobre los costes derivada del aumento de los precios de las materias primas se disipará progresivamente.

Los datos indican que el aumento de la inflación al consumo se moderará en los próximos meses y aliviará la presión sobre el Banco de Japón (BoJ) para que retire pronto su enorme estímulo monetario.

La lectura del índice de precios de bienes corporativos, que mide los precios que las empresas se cobran entre sí por sus bienes y servicios, se comparó con la previsión media del mercado de una caída del 0,3% y siguió a un aumento del 0,3% en noviembre.

El resultado fue el más bajo desde una caída del 0,9% en febrero de 2021, según datos del BoJ publicados el martes.

La desaceleración de los precios al por mayor se debió en parte a los subsidios estatales para contener los precios del petróleo y las facturas energéticas, que combinados recortaron 0,9% de la inflación al por mayor, dijo un responsable del BoJ en una rueda de prensa.

El dato de los precios al por mayor, considerado un indicador adelantado de la inflación al consumo, es uno de los factores que examina el Banco de Japón para calibrar las tendencias generales de los precios y decidir el momento de abandonar la política monetaria ultralaxa.

(Reporte de Leika Kihara; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)