El Consorcio Británico de Minoristas dijo que la inflación anual de los precios de las tiendas se enfrió hasta el 6,9% en agosto, su nivel más bajo desde octubre de 2022, debilitándose desde el 7,6% de julio.
La inflación de los precios de los alimentos cayó al 11,5% desde el 13,4% de julio, impulsada por la ralentización de los aumentos de la carne, las patatas y algunos aceites de cocina. La inflación no alimentaria se mantuvo en el 4,7%.
"Estas cifras habrían sido aún más bajas si el gobierno no hubiera aumentado los impuestos sobre el alcohol a principios de este mes", declaró Helen Dickinson, directora ejecutiva del BRC.
Los precios subieron en términos intermensuales un 0,5%, tras haber caído en julio por primera vez en dos años respecto a junio.
La medida de la inflación del BRC recoge los precios de los bienes vendidos en tienda y se considera una señal temprana para el índice oficial de precios al consumo más amplio, que ha caído desde un máximo de más del 11% en octubre pasado hasta el 6,8% en julio.
Sin embargo, la inflación sigue siendo más de tres veces superior al objetivo del Banco de Inglaterra y los inversores esperan una 15ª subida consecutiva de los tipos de interés hasta el 5,5% desde el 5,25% el 21 de septiembre tras la próxima reunión programada del Comité de Política Monetaria.
