La libra esterlina cayó el miércoles mientras los operadores mantenían la aversión al riesgo y seguían digiriendo los datos del martes que mostraban que la inflación británica se mantuvo inesperadamente en el 6,7% en septiembre, lo que aumenta la posibilidad de otra subida de los tipos de interés.

A las 0851 GMT, la libra perdía un 0,3% frente al dólar, a 1,2106 dólares, y caía en la misma medida frente al euro, a 87,03 peniques.

"La libra esterlina ha estado cotizando con su típica beta alta a las condiciones de riesgo global en los últimos días", dijo Nicholas Rees, analista de mercados de divisas de Monex Europe, y las preocupaciones en torno a un posible repunte de los precios de la energía derivado de la crisis en Oriente Medio han vuelto a presionar a la libra esta mañana.

El mercado también espera con expectación las declaraciones del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, a las 1600 GMT.

"La libra cae por tercer día consecutivo por la fortaleza del dólar debido a los flujos de refugio, y mientras los rendimientos del Tesoro estadounidense alcanzan máximos de 16 años, la expectativa es que la Reserva Federal mantenga los tipos de interés más altos durante más tiempo", dijo Fiona Cincotta, analista senior de mercados financieros de City Index.

A nivel nacional, los operadores siguen pendientes de los datos salariales del lunes y de las cifras de inflación del martes. El dato de los precios al consumo, más elevado de lo esperado, siguió a los datos que mostraban que el crecimiento de la remuneración regular de los trabajadores británicos se ralentizó respecto al récord anterior y que las ofertas de empleo también disminuyeron.

Las señales de un mercado laboral más blando aumentaron las posibilidades de que el Banco de Inglaterra mantenga los tipos sin cambios en su próxima reunión, mientras que las cifras de inflación hicieron lo contrario.

"El modesto undershoot en los datos salariales contrastó con un ligero beat en la inflación", dijo Rees de Monex.

"En conjunto, sin embargo, ambos muestran signos de ralentización de las presiones inflacionistas y con los portavoces del BoE habiendo puesto recientemente un listón muy alto para reanudar la subida de tipos en nuestra opinión, no creemos que esta ronda de datos mueva la aguja ni para el MPC ni para la libra".

Los mercados monetarios sitúan en un 82% la probabilidad de que el Banco de Inglaterra mantenga los tipos sin cambios en su próxima reunión de noviembre.

Las ventas minoristas británicas de septiembre se publicarán el viernes, mientras que la lectura preliminar de la actividad empresarial de octubre llegará la semana que viene.