LONDRES, 18 oct (Reuters) - La inflación anual de los precios al consumo británicos (IPC) se mantuvo en septiembre en su nivel más bajo en 18 meses, el 6,7%, contrariando las expectativas de los economistas de un nuevo descenso, según mostraron el miércoles los datos oficiales.

Los mercados financieros esperaban que el Banco de Inglaterra mantuviera los tipos de interés en el 5,25% el 2 de noviembre, tras haberlos mantenido sin cambios en septiembre a raíz de la inesperada caída de la tasa de inflación de agosto el día antes de anunciar su decisión.

La libra esterlina subía ligeramente tras los datos, lo que aumenta las posibilidades de una nueva subida de tipos por parte del Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés).

Los datos del miércoles mostraron que la inflación subyacente --que excluye los volátiles precios de los alimentos, la energía, el alcohol y el tabaco y a veces se considera que ofrece una mejor guía de las tendencias subyacentes de los precios-- cayó menos de lo esperado al 6,1% en septiembre, desde el 6,2% de agosto.

La inflación de los precios de los servicios --otro componente del IPC que estudia el BoE-- subió al 6,9% en septiembre, desde el 6,8%.

En octubre de 2022, la inflación británica de los precios al consumo alcanzó su nivel más alto en 41 años (11,1%), después de que los precios europeos de la energía se dispararan tras la invasión rusa de Ucrania, lo que se sumó a las presiones causadas por las dificultades en la cadena de suministro y la escasez de mano de obra tras la pandemia del COVID-19.

En su última serie de previsiones de agosto, el Banco de Inglaterra estimó que la inflación se mantendría por encima de su objetivo del 2% hasta principios de 2025.

El Gobierno británico también está muy atento a la inflación, después de que el primer ministro, Rishi Sunak, se comprometiera a reducirla a la mitad a principios de este año y muchos hogares han visto caer su nivel de vida, ya que los salarios han tenido dificultades para seguir el ritmo de los precios.

"Como hemos visto en otros países del G7, la inflación rara vez cae en línea recta, pero si nos atenemos a nuestro plan, esperamos que siga bajando este año", dijo el ministro de Finanzas, Jeremy Hunt, tras conocerse los datos.

La inflación británica de los precios al consumo sigue siendo la más alta de las principales economías avanzadas, seguida de Francia e Italia, con tasas del 5,7% y el 5,6% respectivamente en septiembre.

Los precios de producción --que representan lo que cobran los fabricantes a mayoristas y minoristas-- cayeron un 0,1% anual en septiembre, tras un descenso del 0,5% en agosto.

(Reporte de David Milliken; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)