Los empresarios rusos llamaron la atención en enero sobre los problemas de liquidación con los bancos chinos. Estados Unidos ha estado amenazando a los bancos de países como Turquía y China con sanciones secundarias por facilitar el comercio con Rusia.
El periódico Izvestia, citando fuentes del mercado, dijo el jueves que los bancos chinos Ping An Bank y Bank of Ningbo habían dejado de procesar pagos en moneda china procedentes de Rusia.
El periódico también dijo que el DBS Bank, el Great Wall West China Bank y el China Zheshang Bank habían introducido algunas restricciones en las operaciones con Rusia.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que la situación con los bancos chinos había causado problemas, pero afirmó que podrían superarse.
"Por supuesto, la presión sin precedentes de Estados Unidos y la Unión Europea sobre la República Popular China continúa, incluso en el contexto de las relaciones con nosotros", declaró Peskov en una conferencia telefónica diaria con periodistas.
"Esto, por supuesto, crea ciertos problemas, pero no puede convertirse en un obstáculo para el desarrollo ulterior de nuestras relaciones comerciales y económicas (con China)", dijo Peskov, añadiendo que Rusia y China podrían superar tales obstáculos.
Rusia se ha convertido en uno de los principales exportadores de petróleo a China a medida que aleja su comercio de Europa, que impuso amplias sanciones contra Moscú tras el inicio de lo que el Kremlin denominó una operación militar especial en Ucrania en febrero de 2022.
