El decreto, firmado a última hora del jueves, establecía la creación de un holding ruso para gestionar el activo, con los derechos del operador aeroportuario alemán Fraport y del fondo soberano qatarí Qatar Investment Authority entre los que pasarán a manos rusas.
"Primero debemos verificar la información y examinar lo que esto significa en el futuro para nuestra implicación en San Petersburgo, que hemos dejado en suspenso desde la guerra de agresión rusa", declaró un portavoz de Fraport.
El QIA declinó hacer comentarios.
La sociedad gestora del aeropuerto tiene 14 copropietarios. El banco estatal ruso VTB posee una participación del 25,01%, Fraport del 25%, el QIA del 24,99% y un consorcio de inversores entre los que se encuentran el Fondo Ruso de Inversión Directa, el fondo soberano de Abu Dhabi Mubadala y el grupo de capital riesgo Baring Vostok poseen el 25% restante.
Los derechos de los accionistas extranjeros pasarán a dos entidades rusas diferentes. Los accionistas rusos conservarán sus derechos.
VTB dijo que sólo era accionista y declinó hacer más comentarios.
Rusia ha puesto los activos de un puñado de empresas occidentales bajo "gestión temporal" este año, mientras las empresas extranjeras intentan salir del país tras la decisión de Moscú en febrero de 2022 de enviar decenas de miles de tropas a Ucrania.
El decreto establecía que los accionistas extranjeros de Airport podrían recuperar sus derechos sobre las participaciones en la nueva empresa si solicitaban y concluían acuerdos corporativos que cumplieran las leyes rusas sobre inversión extranjera.
El gobierno no será propietario de la nueva empresa, pero nombrará a su director ejecutivo.
En anteriores confiscaciones de activos se puso al sobrino del líder checheno Ramzan Kadyrov al frente de la filial del fabricante francés de yogures Danone en julio y al antiguo jefe de Baltika Breweries, Taimuraz Bolloev, se le dio el control de la participación de la cervecera danesa Carlsberg en la empresa.
