La planta X-energy Xe-100, con cuatro reactores de alta temperatura refrigerados por gas, se construirá en uno de los emplazamientos de Dow en la costa estadounidense del Golfo de México. Las empresas tienen previsto concretar la ubicación este año.

Los desarrolladores de reactores nucleares quieren construir una nueva generación de centrales atómicas más pequeñas que las actuales, pero que, si tienen éxito, podrían utilizarse en una amplia variedad de entornos, desde plantas industriales hasta pueblos rurales, para ayudar a la transición fuera de los combustibles fósiles que emiten grandes cantidades de gases de efecto invernadero.

Los partidarios de los reactores nucleares de nueva generación, incluida la administración Biden, afirman que la tecnología es crucial para luchar contra el cambio climático. Los críticos dicen que son más caros que las energías renovables y las tecnologías de almacenamiento de energía y que tardan demasiado en desarrollarse.

La planta de X-energy proporcionará a una instalación de Dow calor de proceso y energía para fabricar productos. Dow, una empresa química, fabrica una amplia variedad de productos, incluido el polietileno utilizado en envases, pinturas y espumas.

"La colaboración de X-energy con Dow tiene una importancia añadida debido a la inmensa oportunidad de reducir aún más las emisiones en el sector industrial, que consume mucha energía", declaró el director ejecutivo de X-energy, Clay Sell.

Los reactores se alimentarían probablemente con uranio poco enriquecido de alto ensayo, o HALEU, del que Rusia es el único productor. La empresa estadounidense Centrus Energy Corp está intentando producir una fuente nacional de HALEU.

El acuerdo incluye hasta 50 millones de dólares para trabajos de ingeniería, de los que hasta la mitad podrán ser financiados a través del Programa de Demostración de Reactores Avanzados del Departamento de Energía de EE.UU., y la otra mitad por Dow. Las empresas presentarán una solicitud de construcción a la Comisión Reguladora Nuclear de EE UU.

Durante la administración del presidente republicano Donald Trump en 2020, el Departamento de Energía seleccionó a X-energy para recibir hasta 1.200 millones de dólares en financiación federal de costes compartidos para desarrollar, autorizar, construir y demostrar un reactor avanzado operativo y una instalación de fabricación de combustible para finales de la década.