El índice paneuropeo STOXX 600 subió un 0,6% para terminar en un máximo histórico de 464,45 puntos al cierre, siendo los valores minoristas y tecnológicos los que mejor se comportaron.

La empresa británica de ingeniería aeronáutica Meggitt se disparó un 56,7% y se situó en lo más alto del STOXX 600, alcanzando un récord después de que la empresa industrial estadounidense Parker-Hannifin dijera que iba a comprar a su rival británica en una operación valorada en 8.760 millones de dólares.

Entre otras operaciones, el proveedor británico de servicios de gestión de activos Sanne Group subió un 7,6% después de que dijera que podría recibir una oferta de compra del gestor de fondos Apex Group.

La inmobiliaria alemana Vonovia subió un 2,2% al lanzar una oferta edulcorada de 19.100 millones de euros (22.700 millones de dólares) para comprar a su rival Deutsche Wohnen.

Axa, la segunda aseguradora de Europa, ganó un 4,2% tras registrar un aumento del 180% en su beneficio neto del primer semestre.

Su rival alemana Allianz cayó un 7,8% después de que los reguladores estadounidenses iniciaran una investigación sobre los fondos Structured Alpha de Allianz Global Investors.

La entidad crediticia centrada en Asia, HSBC, bajó un 0,3%, incluso después de superar las previsiones de beneficio antes de impuestos del primer semestre y de restablecer el pago de dividendos.

De las más de la mitad de las empresas del STOXX 600 que han presentado resultados en el segundo trimestre hasta ahora, el 67% ha superado las estimaciones de beneficios, según los datos de Refinitiv IBES.

"Habiendo alcanzado máximos históricos tras los resultados del primer trimestre, la amplitud de las revisiones positivas de los beneficios en Europa sigue siendo muy fuerte, tanto en términos absolutos como en comparación con sus homólogos", señalan los estrategas de renta variable europea de Morgan Stanley en una nota. "Europa ve ahora las mejores revisiones de beneficios de todas las regiones globales".

El optimismo en torno a los beneficios europeos y a la reapertura económica ayudó al índice de referencia STOXX 600 a terminar julio con un sexto mes consecutivo de ganancias, a pesar de la preocupación por la inflación, el aumento de los casos de virus en Asia y una importante medida reguladora en China.

Gráfico: El STOXX 600 alcanza un nuevo máximo,

Mientras tanto, una encuesta mostró que la actividad manufacturera en toda la zona del euro siguió creciendo a un ritmo vertiginoso en julio, pero los cuellos de botella de la oferta dispararon los costes de los insumos.

El proveedor británico de aviones y piezas de automóviles Senior Plc se disparó un 9,3% después de anunciar un beneficio en el primer semestre, frente a las pérdidas del año anterior.

Su par Melrose ganó un 5,2%, mientras que Rolls-Royce sumó un 3,8%.

La segunda cervecera del mundo, Heineken, subió un 0,6% después de presentar unos beneficios en el primer semestre por encima de las expectativas, pero advirtió que el aumento de los costes de las materias primas reduciría los márgenes.

El fabricante de automóviles alemán Daimler subió un 1,5% después de que Goldman Sachs añadiera el valor a su lista de valores convencidos.