Tras una sesión volátil, el IBEX35 terminó con un descenso del -0,71% hasta los 8226 puntos, penalizado por las malas estadísticas de actividad a ambos lados del Atlántico. 

En la zona euro, los índices PMI de manufacturas y servicios se situaron en 49,7 y 50,2 respectivamente (frente a los 49,8 y 51,2 anteriores). Estos mismos índices se deterioraron más significativamente en Estados Unidos, con el PMI de servicios cayendo a 44,1 (47,3 el mes pasado). El PMI manufacturero cayó a 51,3 (52,2 anteriormente). 

Las ventas de viviendas nuevas también decepcionaron (511.000 frente a 585.000 el mes pasado). 

En cuanto a las acciones, Acerinox ganó un 3,82%, ArcelorMittal un 3,02%, Banco de Sabadell un 1,46% y Grifols un 1,14%. Entre los mayores descensos, Cellnex Telecom perdió otro 3,59%, Almirall un 3,27%, Rovi un 2,79% y Fluidra un 2,77%.

Después de haber vivido su peor sesión en dos meses el día anterior, debido a la preocupación por el alcance de la subida de tipos en septiembre, los índices estadounidenses volvieron a terminar en terreno negativo. El Dow Jones perdió un 0,47% hasta los 32909 puntos, el S&P500 cedió un 0,22% hasta los 4128 puntos y el Nasdaq100 un 0,07%. 

Por tanto, la cautela debería seguir estando a la orden del día en Europa, a la espera del PIB estadounidense del jueves y del discurso de Jerome Powell del viernes en el simposio de Jackson Hole. Se espera que el IBEX35 abra un -0,38% a la baja esta mañana. 

En términos horarios, el impulso sigue siendo claramente negativo. Ahora seguiremos de cerca la salida de los 8200/8400 puntos para actuar. Una ruptura de la parte inferior de esta zona abogaría por una continuación de la venta hacia los 8100/8000 puntos.