Un vistazo a la jornada en los mercados asiáticos de la mano de Jamie McGeever.

Un aluvión de datos económicos chinos el martes dará a los inversores una imagen más clara de si sus crecientes temores sobre la salud de la mayor economía de Asia últimamente están justificados.

Si las instantáneas de abril de las ventas minoristas, la inversión urbana y la producción industrial resultan más débiles de lo esperado -y las previsiones de consenso son de sólidos repuntes con respecto al mes anterior-, los osos y agoreros de China estarán en alza.

El sentimiento de los mercados más amplios puede estar razonablemente bien respaldado después de que Wall Street cosechara modestas ganancias el lunes a pesar de la alarmante caída de un índice clave de la actividad fabril en EE.UU. y de otro día de estancamiento en las negociaciones sobre el techo de la deuda estadounidense.

En cuanto a los datos chinos, las previsiones de las encuestas de Reuters entre economistas son las siguientes: las ventas minoristas aumentarán un 21% interanual, el doble que en marzo; la inversión urbana subirá un 5,5%; y la producción industrial aumentará un 10,9% interanual, más del doble que en marzo.

El impulso del crecimiento chino se ha ralentizado bruscamente, lo que se refleja de forma más dramática en el desplome de las importaciones y la inflación, y el índice de sorpresa económica china de Citi cayó el lunes por debajo de 100,0 por primera vez desde el 9 de marzo.

Pero las acciones chinas rompieron su reciente racha de pérdidas el lunes -el índice de los blue chips subió un 1,5% para su mejor día desde el 20 de febrero, y el segundo mejor día de este año- mientras los inversores dirigen su atención a tres informes de resultados clave esta semana.

Los gigantes tecnológicos Baidu y Tencent presentan sus resultados del primer trimestre el martes y el miércoles, respectivamente, y Alibaba publica los resultados de todo el año 2023 el jueves.

El índice tecnológico Hang Seng ha tenido un rendimiento significativamente inferior al del Nasdaq este año -ha bajado un 5%, mientras que el principal índice tecnológico de Wall Street ha subido un 18%-, pero ha subido durante las últimas cuatro sesiones, su mejor racha desde marzo.

En el resto de Asia, el baht tailandés registró el lunes su mayor subida frente al dólar en tres semanas, impulsado por unas cifras de crecimiento del PIB mejores de lo esperado, aunque los inversores se prepararon para la incertidumbre política después de que la oposición se asegurara una sorprendente victoria electoral el domingo.

Mientras tanto, la convención en torno a los periodos de bloqueo previos a las decisiones políticas es un poco diferente en Filipinas que en Estados Unidos, como demuestran los comentarios realizados el lunes por el gobernador del banco central a sólo tres días de la próxima reunión.

El gobernador del Bangko Sentral ng Pilipinas (BSP), Felipe Medalla, declaró a los periodistas que el banco central podría hacer una pausa en sus subidas de los tipos de interés esta semana, después de que la inflación de abril se suavizara de nuevo.

El peso filipino cayó el lunes a su nivel más bajo frente al dólar en casi un mes.

He aquí tres acontecimientos clave que podrían proporcionar más dirección a los mercados el martes:

- Sentimiento del consumidor australiano (mayo)

- Inversión, ventas minoristas y producción industrial en China (abril)

- PIB de la zona euro (1er trimestre, estimación rápida)