La medida fue condenada por el partido nacionalista Ley y Justicia (PiS), al que pertenecen, como "un secuestro ilegal y una violación de todas las normas democráticas".

Sin embargo, los miembros del nuevo gobierno de coalición proeuropeo han afirmado que demuestra que nadie está por encima de la ley.

A continuación se exponen algunos de los principales hechos que dieron lugar a su condena.

AGENCIA ANTICORRUPCIÓN

Kaminski fue elegido diputado por primera vez en 1997 y reelegido en 2001 y 2005. Dimitió en 2006 para convertirse en jefe de la Oficina Central Anticorrupción.

Sus oponentes políticos afirmaron que él y sus socios perseguían la corrupción con excesivo celo, utilizando métodos que, según ellos, a veces eludían las leyes y acosando a personas inocentes.

En 2009, Kaminski y Wasik fueron acusados de abuso de poder por permitir que agentes bajo su mando utilizaran la trampa en una investigación. Ambos han negado haber obrado mal.

PERDÓN

En 2015, Kaminski y Wasik fueron declarados culpables y condenados a tres años de prisión. Apelaron.

Unos meses más tarde, después de que PiS llegara al poder, el presidente Andrzej Duda indultó a ambos hombres, permitiendo que Kaminski se convirtiera en ministro del Interior.

Los abogados cuestionaron si Duda tenía derecho a indultarlos antes de que un tribunal de apelación emitiera una sentencia definitiva. El Tribunal Supremo dijo el año pasado que el caso debía reabrirse.

DECISIÓN FINAL DEL TRIBUNAL

Tras la reapertura del caso, Kaminski y Wasik fueron condenados en diciembre a dos años de prisión. El lunes, un tribunal dictó orden de ingreso en prisión para ambos hombres.

La policía entró el martes en el palacio presidencial polaco para detener a ambos. El primer ministro Donald Tusk había acusado antes a Duda de obstruir la justicia después de que los dos legisladores se presentaran en el palacio, lo que llevó a la policía a buscarlos en los coches que salían del edificio.

Cientos de manifestantes se reunieron frente al palacio y frente a una comisaría de policía en la que estaban detenidos los dos. La multitud coreaba "Libertad para los presos políticos" y "¡Vergüenza!".

En protesta por su detención, Kaminski inició una huelga de hambre, mientras que Duda se declaró profundamente conmocionado por las detenciones y prometió que no descansaría hasta que Kaminski y Wasik fueran liberados.