BRUSELAS, 4 mar (Reuters) - La Unión Europea debe permitir a los productores de alimentos ucranianos acceder a los mercados comunitarios a largo plazo, en lugar de limitarse a prorrogar las medidas año tras año, dejándolos a merced de las presiones políticas, declaró el lunes un funcionario ucraniano de alto rango.

Ucrania quiere eliminar de forma permanente los aranceles y contingentes a las importaciones agrícolas de la UE mediante la actualización de su acuerdo comercial con la UE, o al menos prorrogar la suspensión actual durante tres años, declaró Markiyan Dmytrasevych, viceministro de Política Agraria y Alimentación.

"Necesitamos algo más conveniente para la planificación", declaró a Reuters en una entrevista durante un viaje a Bruselas. "Cada año se destinan muchos recursos a estas conversaciones. Luego tenemos nuevas demandas, nuevas protestas en la UE y sus Estados miembros".

Los exportadores de alimentos ucranianos se han enfrentado en los últimos meses a una oleada de protestas, que han incluido bloqueos de pasos fronterizos, por parte de los agricultores de la UE, muchos de ellos enfadados por lo que consideran competencia desleal de unas importaciones ucranianas más baratas.

La Comisión Europea ha propuesto que los derechos de importación y los contingentes de productos agrícolas ucranianos -suspendidos inicialmente en 2022 tras la invasión rusa, que afectó a los envíos a través del mar Negro- se levanten un año más, hasta junio de 2025.

La propuesta introduce un "freno de emergencia" para las aves de corral, los huevos y el azúcar, que permite imponer aranceles si las importaciones superan los niveles promedio de 2022 y 2023.

La mayoría de los gobiernos de la UE respaldaron la propuesta, pero la situación entre los legisladores no está clara. Una comisión parlamentaria tiene previsto votar la propuesta el jueves, pero con una serie de posibles enmiendas.

Entre ellas, ampliar la lista de productos con "freno de emergencia" y añadir como referencia el año 2021, antes de la invasión rusa, cuando las exportaciones ucranianas a la UE estaban limitadas por aranceles y cuotas.

"Eso no funcionará para nosotros", dijo Dmytrasevych.

Afirmó que los productos agrícolas ucranianos no perjudican a los mercados de la UE. Según Dmytrasevych, el azúcar ucraniano importado en la UE representa menos del 3% del consumo, y los precios en los supermercados siguen siendo superiores a los de antes de la guerra.

De hecho, Rumania había solicitado específicamente importaciones de azúcar, mientras que Hungría, con una prohibición efectiva de las importaciones, también había necesitado azúcar ucraniano para equilibrar los precios.

(Reportaje de Philip Blenkinsop; Editado en español por Juana Casas)