KIEV, 23 nov (Reuters) - El gremio ucraniano de comerciantes UGA afirmó el jueves que los "poco meditados" planes del Parlamento para cambiar las normas del comercio de cereales podrían paralizar por completo las exportaciones de grano de Ucrania.

El 21 de noviembre, el Parlamento aprobó en primera lectura un proyecto de ley que modificaría la fiscalidad de las transacciones de exportación de cereales y podría introducir precios mínimos de exportación.

El proyecto de ley pretende minimizar la evasión fiscal de determinados productos agrícolas, como el grano y las semillas oleaginosas.

"La UGA está preocupada por la posible paralización total de las exportaciones de grano de Ucrania debido a la adopción por el Parlamento de cambios legislativos poco meditados sobre las exportaciones de grano y semillas oleaginosas que introducen contradicciones en la legislación, incluida la fiscal", dijo el grupo en un comunicado.

Señaló que algunos de los nuevos requisitos son imposibles de cumplir y otros pueden acarrear pérdidas significativas tanto para los comerciantes como para los agricultores.

Ucrania era el cuarto proveedor mundial de grano antes de la invasión rusa de febrero de 2022 y, en términos de valor, el grano representó la mitad de sus exportaciones totales el año pasado.

UGA dijo que el proyecto de ley proponía que los precios mínimos de exportación no fueran inferiores a los precios promedio del grano cotizados en las bolsas internacionales durante los 10 días anteriores.

"Este requisito es inaplicable (...) en algún momento el precio mínimo de exportación de Ucrania fijado por este mecanismo superará los precios reales del mercado mundial", dijeron.

La UGA afirmó que los precios mundiales determinan los precios de compra y exportación en Ucrania, y no al revés.

A principios de este mes, Ucrania introdujo normas que exigen el registro obligatorio de las empresas exportadoras de alimentos, con el fin de evitar abusos como la evasión fiscal en la exportación de productos agrarios.

Ucrania es uno de los principales productores y exportadores de alimentos del mundo, pero las autoridades calculan que hasta un tercio se compran al contado para su envío al extranjero, sin pagar los impuestos necesarios.

(Reporte de Pavel Polityuk; edición en español de Javier López de Lérida)