El misil, disparado frente a la costa oriental de Corea del Norte, voló durante 74 minutos hasta alcanzar una altitud de 6.000 km y un alcance de 1.000 km, según Japón, en lo que sería el mayor tiempo de vuelo de un misil norcoreano.

"Esto constituye una clara y flagrante violación de múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y supone una grave amenaza para la paz y la estabilidad en la península coreana y más allá", afirmaron los máximos responsables de Exteriores de EE.UU., Corea del Sur y Japón en la declaración conjunta hecha pública el viernes.

Los países instaron a Corea del Norte "a poner fin a sus acciones ilegales y de escalada y a volver rápidamente al diálogo", según la declaración.

Los funcionarios -el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, el ministro de Asuntos Exteriores de Japón, Yoshimasa Hayashi, y el ministro de Asuntos Exteriores de Corea del Sur, Park Jin- se reunieron el viernes al margen del Foro Regional de la ASEAN en Yakarta, Indonesia.

Blinken reafirmó en esa reunión los "férreos compromisos" de Estados Unidos con la defensa de Japón y Corea del Sur, según una declaración separada del Departamento de Estado estadounidense.

El "continuo desarrollo por parte de Corea del Norte de sus capacidades nucleares y de misiles balísticos no hará sino reforzar la determinación de los tres países y de la comunidad internacional de lograr la completa desnuclearización de la península coreana", decía la declaración conjunta emitida tras la reunión.