Las ventas de propiedades por superficie registraron un descenso del 20,5% en enero-febrero respecto al año anterior, frente a la caída del 23,0% en diciembre del año pasado.

China ha estado intensificando las medidas para revitalizar su frágil sector inmobiliario después de que una ofensiva reguladora sobre el apalancamiento de los promotores provocara una crisis de liquidez que se ha convertido en una bola de nieve.

Las autoridades lanzaron en enero un mecanismo denominado "lista blanca", que canaliza fondos de los bancos estatales hacia proyectos inmobiliarios locales identificados por los gobiernos municipales como justificables para recibir apoyo financiero.

El inicio de nuevas construcciones, medido por la superficie construida, se desplomó un 29,7% interanual, tras un desplome del 11,56% en diciembre de 2023.

Los fondos captados por los promotores inmobiliarios chinos se redujeron un 24,1% interanual, tras una caída del 17,77% en diciembre del año pasado.