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La economía de la capital creció un 5,2% en 2023, en línea con la economía nacional, que hasta ahora ha registrado un débil crecimiento post-pandémico en medio de una crisis inmobiliaria cada vez más profunda, una deuda creciente de los gobiernos locales y riesgos deflacionistas persistentes.
"El objetivo de alrededor del 5% es necesario para estabilizar las expectativas e impulsar la confianza, para lograr importantes objetivos de subsistencia como el empleo y los ingresos familiares", informó el domingo el Beijing Daily, citando a un funcionario del gobierno no identificado.
"Pero una tasa de crecimiento en torno al 5% sigue siendo muy difícil, y alcanzar el objetivo requiere arduos esfuerzos", dijo el funcionario.
Pekín pretende controlar este año su tasa de desempleo urbano, basada en encuestas, por debajo del 5%.
El crecimiento económico de China en 2023, que se situó ligeramente por encima del objetivo anual de alrededor del 5%, se vio favorecido en parte por el efecto de base baja del año anterior en medio de los bloqueos de COVID-19.
Los dirigentes chinos han hecho de la recuperación de la confianza en la economía una de sus principales prioridades políticas, ya que las empresas y los consumidores desconfían de la seguridad del empleo, el crecimiento de los ingresos y el mercado de la vivienda.
El objetivo de crecimiento de Pekín para 2024 "puede servir de precursor" de un objetivo de crecimiento nacional más favorable, afirmó Tommy Xie, jefe de Investigación de la Gran China del OCBC Bank.
Se espera que el objetivo de crecimiento nacional se desvele en la apertura de la reunión parlamentaria anual en marzo.
"Esta revisión al alza del objetivo de crecimiento para el año en curso, incluso con una base más elevada, refleja la postura más favorable al crecimiento de Pekín", afirmó Xie en una nota.
Los responsables políticos esperan que Pekín mantenga un objetivo de crecimiento similar de alrededor del 5% para este año, pero los analistas afirman que puede ser una tarea difícil incluso con estímulos adicionales.
Los analistas encuestados por Reuters esperaban que el crecimiento económico se ralentizara hasta el 4,6% este año.
Tanto el municipio suroccidental de Chongqing como la provincia de Sichuan fijan sus objetivos de crecimiento para 2024 en torno al 6%, mientras que la provincia oriental de Shandong pretende crecer más del 5% este año. La provincia septentrional de Hebei fija el objetivo de crecimiento para este año en torno al 5,5%. (Reportaje de Ellen Zhang y Kevin Yao; edición de Miral Fahmy)
