La reforma obligará a los grandes productores de cobre y litio que operan en la nación latinoamericana, rica en minerales, a pagar más impuestos y regalías al gobierno.
Chile es el primer productor mundial de cobre y el segundo de litio, ambos considerados clave para la fabricación de las futuras flotas de vehículos eléctricos alimentados por baterías recargables.
Por 101 votos a favor y 24 en contra, los legisladores aprobaron modificaciones al proyecto de ley sobre impuestos y regalías que el Senado respaldó la semana pasada.
La desigual votación fue saludada por el ministro de Finanzas, Mario Marcel, quien subrayó que la mayor participación gubernamental exigida a las empresas mineras abordaría los abusos del pasado.
"Con esta legislación buscamos evitar lo que ocurrió muchas veces con las riquezas naturales de nuestro país: fueron explotadas, desaparecieron, lo que dejó muy poco para el país y su desarrollo futuro", dijo Marcel a la prensa tras la votación.
Según la reforma, la tasa impositiva máxima llegará hasta casi el 47% para las empresas que produzcan más de 80.000 toneladas de cobre fino al año, considerada alta por la industria.
También establece un impuesto ad valorem del 1% sobre las ventas de cobre de las empresas que vendan más de 50.000 toneladas de cobre fino, así como un impuesto adicional del 8% al 26% en función del margen de explotación de la minera.
La asociación minera Sonami expresó su alivio por el hecho de que la medida pusiera fin a la incertidumbre sobre el tipo de reforma que adoptarían finalmente los legisladores.
"La incertidumbre duró casi cinco años y, sin duda, perjudicó a la principal actividad productiva del país", dijo Sonami en un comunicado.
La asociación describió el lenguaje legislativo final como "mejor" que el propuesto inicialmente por el gobierno, dando crédito a Marcel por promulgar revisiones favorables a la industria. (Reportaje de Fabián Cambero; Redacción de Carolina Pulice; Edición de David Alire García y Jamie Freed)
