NAIROBI (Reuters) - Abogados kenianos se han movilizado para bloquear el despliegue de policía previsto por el país en Haití, según se desprende de una presentación judicial, días antes de la llegada prevista de los agentes al país caribeño para hacer frente a la espiral de violencia.

En respuesta a la petición de ayuda de Haití, Kenia se ofreció en julio del año pasado a enviar 1.000 agentes a Haití para ayudar a hacer frente al empeoramiento de la crisis de seguridad, donde la escalada del control de las bandas ha sumido a millones de personas en una crisis humanitaria.

Sin embargo, la Tribunal Superior de Kenia dictaminó en enero que los agentes de policía no podían ser enviados a Haití a falta de un "acuerdo recíproco" con el gobierno anfitrión.

En marzo, el presidente keniano, William Ruto, firmó un acuerdo de seguridad con el entonces primer ministro haitiano, Ariel Henry, que Nairobi esperaba que satisficiera las objeciones del tribunal y permitiera el despliegue.

Los abogados Ekuru Aukot y Miruru Waweru, que lideran un partido de la oposición en Kenia llamado Thirdway Alliance, afirmaron en su solicitud al Tribunal Superior el jueves que los demandados, incluidos Ruto y la policía, habían desobedecido flagrantemente la orden judicial al firmar el instrumento recíproco con Haití.

Afirmaron que el gobierno incurriría en desacato al tribunal si seguía adelante con el despliegue.

"Los demandantes han sido informados fehacientemente de que el despliegue impugnado puede llevarse a cabo en cualquier momento a partir de ahora", afirman los abogados en su demanda.

El portavoz de Ruto no respondió inmediatamente a una petición de comentarios sobre la solicitud.

El gobierno de Kenia declaró en marzo que suspendía el despliegue tras la dimisión de Henry. Sin embargo, Ruto declaró posteriormente que la toma de posesión de un consejo de transición en Haití el 25 de abril había disipado las preocupaciones sobre un vacío de poder en el país y que Kenia estaba debatiendo ahora cómo proceder con su despliegue.

La semana pasada, el Mando Sur del ejército estadounidense declaró que contratistas civiles habían llegado a Haití para construir alojamientos para la fuerza dirigida por Kenia.

Jamaica, Bahamas, Barbados, Benin, Chad y Bangladés también se han comprometido a aportar personal a la fuerza.

Los gobiernos extranjeros se han mostrado reacios a participar en la misión. Muchos haitianos también desconfían de las intervenciones internacionales después de que anteriores misiones de la ONU dejaron tras de sí una devastadora epidemia de cólera y escándalos de abusos sexuales.

(Reporte de Humphrey Malalo; Escrito por George Obulutsa; Editado en Español por Ricardo Figueroa)