BRUSELAS, 29 jun (Reuters) - Un acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y el bloque Mercosur podría aumentar la demanda de productos agrícolas de Brasil a expensas de la tierra y los derechos de los pueblos indígenas, dijo el jueves un destacado activista.

"Estamos en contra de este acuerdo", dijo a Reuters en una entrevista Dinamam Tuxa, coordinador de la organización indígena más grande del país, la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB, por su sigla original).

"Puede ser muy difícil detenerlo, pero queremos hacer nuestras propuestas sobre el consentimiento previo y los derechos territoriales de los pueblos indígenas", expresó.

La Comisión Europea llegó a un acuerdo comercial con el bloque que integran Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay en 2019.

Ahora la Comisión y algunos estados miembros de la UE han planteado la posibilidad de reactivarlo después de que se suspendiera en gran parte debido a las preocupaciones del bloque sobre la deforestación de la Amazonía.

Tuxa, que se reunirá con funcionarios y legisladores de la UE en los próximos días, dijo que el acuerdo, incluso con un posible anexo sobre deforestación y desarrollo sostenible, no garantiza la protección de los derechos de los pueblos indígenas, a pesar de que están consagrados en una convención de la Organización Internacional del Trabajo.

La Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas también exige que se les consulte para obtener el consentimiento libre, previo e informado sobre políticas o proyectos que los afecten.

Tuxa dijo que no había un mecanismo de supervisión para proteger los ecosistemas y que el acuerdo comercial se basaba en un modelo económico que los dañaba inherentemente.

"Cuando se trata de dinero, se olvidan todas las COP (conversaciones climáticas de la ONU) y otros objetivos de sostenibilidad", dijo.

La Comisión, que supervisa la política comercial de la UE, ha dicho que existe una oportunidad para las conversaciones después de la derrota electoral del año pasado del expresidente brasileño Jair Bolsonaro, cuyas políticas contribuyeron a un periodo álgido en la deforestación de la Amazonía.

Sin embargo, no hay garantía de que las conversaciones con su sucesor, Luiz Inacio Lula da Silva, vayan a tener éxito.

Lula ha prometido reconocer plenamente los derechos sobre las tierras indígenas, pero enfrenta una fuerte oposición en el Congreso por parte de los aliados de Bolsonaro.

(Reporte de Philip Blenkinsop. Editado en español por Marion Giraldo)