"Estamos muy, muy lejos de eso", declaró Klaus Mueller, presidente de la Bundesnetzagentur, a la cadena ZDF, señalando los niveles de almacenamiento de gas de Alemania, que se sitúan en el 92,45%. Eso contrasta con el 87,34% de la Unión Europea.
"Podemos hacer frente fácilmente a una, dos o tres semanas en las que hace frío y aumenta el consumo. Pero no debe continuar así en enero y febrero, y tenemos que mirar hacia el próximo invierno, 2023/2024", dijo.
Alemania debe ahorrar al menos un 20% en el consumo de gas y los niveles de almacenamiento no deben caer por debajo del 40% antes del 1 de febrero para evitar la escasez, según el regulador.
"Octubre y noviembre fueron cálidos y hemos sido buenos y cuidadosos con el consumo de gas. Diciembre podría ser uno de los más fríos de los últimos 10 años y más recientemente incluso perdimos un punto porcentual entero de almacenamiento de gas el lunes".
Mueller dijo que ese nivel de agotamiento debería seguir siendo un caso atípico.
"Por lo tanto, a pesar del frío, mi petición: tengan cuidado con su consumo de gas".
