En su intento de reducir las emisiones que calientan el planeta en un 55% para 2030 respecto a los niveles de 1990, la Comisión Europea ha propuesto una reducción del 100% de las emisiones de CO2 de los coches nuevos para 2035. Eso significa que a partir de entonces sería imposible vender coches con motor de combustión.

Los legisladores del Parlamento Europeo han respaldado las propuestas este mes, antes de que tengan lugar las negociaciones con los países de la UE sobre la ley definitiva.

En su intervención en un acto organizado por la asociación industrial alemana BDI, Lindner dijo que seguirían existiendo nichos para los motores de combustión, por lo que una prohibición era errónea, y afirmó que el gobierno no estaría de acuerdo con esta legislación europea.

Lindner, miembro del partido proempresarial Demócratas Libres, que comparte el poder con los socialdemócratas y los verdes, dijo que Alemania seguiría siendo un mercado líder para los vehículos eléctricos.