QUITO, 10 ago (Reuters) - El asesinato del candidato presidencial ecuatoriano Fernando Villavicencio ha hecho que algunos votantes desconfíen de acudir a las urnas el 20 de agosto, lo que dificulta aún más pronosticar el desarrollo de una elección que parece inestable.

Villavicencio, un crítico de la corrupción y el crimen organizado, fue asesinado el miércoles durante un evento de campaña en el norte de Quito.

El asesinato a menos de dos semanas de las elecciones conmocionó al país, donde la delincuencia y la violencia atribuidas al narcotráfico han aumentado considerablemente en los últimos años.

Los votantes dijeron que temían más derramamiento de sangre, y algunos están pensando si cumplir con las reglas de votación obligatoria.

"Yo tengo miedo y estoy pensando en si voy a votar", dijo la manicurista quiteña Margarita Alvarado, de 45 años. "Si este candidato con guardaespaldas no se salvó, tengo miedo de que pase algo de violencia en los recintos electorales".

"Prefiero pagar la multa", dijo Alvarado, refiriéndose al cargo de 45 dólares que se les cobra a quienes tienen entre 18 y 65 años y no votan. "No puedo sufrir esta angustia".

Antes del asesinato ya existía una incertidumbre generalizada sobre la carrera presidencial.

Los candidatos entre el segundo y el quinto lugar, que luchan por un lugar en una posible segunda vuelta en octubre, están dentro del margen de error previsto en los sondeos, dijo la encuestadora Cedatos en una publicación del martes en X, la plataforma anteriormente conocida como Twitter.

Las personas que planeaban votar nulo o en blanco representaban alrededor del 25% de los votantes, dijo la encuestadora.

El asesinato de Villavicencio "complica lo que ya es una crisis política atípica y compleja en Ecuador", dijo Jimena Blanco, analista jefe de Verisk Maplecroft, y Eileen Gavin, analista principal de las Américas, en una nota.

"Con alrededor del 40% de los votantes indecisos, era poco probable que los datos de las encuestas actuales fueran muy precisos; el asesinato ahora agrega una nueva fuente de imprevisibilidad al resultado electoral", agregaron.

Los partidarios de Villavicencio, alrededor del 8% de los encuestados en sondeos recientes, pueden no saber a qué candidato apoyar. A pesar de sus vínculos sindicales, Villavicencio se opuso rotundamente a la principal contendiente de izquierda, Luisa González.

"Sobre el papel, el beneficiario más obvio del asesinato de Villavicencio sería Jan Topic (...) que está haciendo una campaña de mano dura contra el crimen", dijo la consultora Teneo en una nota. "Sin embargo, Topic (...) tiene un reconocimiento de nombre limitado y no parece haber tenido mucho impacto".

A pesar de la suspensión de la campaña de dos opositores y la condena generalizada del asesinato, los políticos siguieron intercambiando críticas.

El partido del candidato denunció el "uso político" de su muerte y algunos simpatizantes criticaron al expresidente Rafael Correa, con quien Villavicencio se enfrentó como periodista de investigación.

González, la candidata respaldada por Correa que lidera la intención de voto con poco menos del 30% del apoyo de los votantes, apuntó al actual presidente Guillermo Lasso, acusándolo de vínculos con la mafia albanesa, algo que Lasso siempre ha negado.

Además de aumentar la abstención de votantes, Paulina Recalde, directora de Perfiles de Opinión, dijo que la violencia y sus consecuencias podrían eventualmente sembrar dudas en el proceso electoral.

Eso podría empeorar la crisis política que llevó a Lasso a convocar elecciones anticipadas, dijo Recalde. "Si las fuerzas políticas no bajan también esta línea de discurso de culpabilizarse mutuamente", agregó.

La contienda electoral se encaminará a una segunda vuelta el 15 de octubre si ningún candidato obtiene más del 50% de los votos válidos o más del 40% si está 10 puntos por delante de su rival más cercano.

El nuevo presidente estará en el cargo hasta mayo de 2025, un término truncado que asegura otra contienda electoral acalorada poco después de que los votantes dejen atrás esta.

(Reporte de Alexandra Valencia. Reporte Adicional de Tito Correa en Quito. Escrito por Julia Symmes Cobb, editado por Javier Leira)