La directora del Consejo de Política Interior, Susan Rice, dijo que Biden seguirá presionando a los legisladores para que aprueben una financiación de 750.000 millones de dólares para esas áreas a lo largo de 10 años, tal y como se recoge en su presupuesto para 2024.
Pero, mientras tanto, está dando instrucciones a las agencias federales para que adopten medidas que no impliquen nuevos gastos para aumentar el acceso de los estadounidenses a guarderías y cuidados de larga duración de alta calidad.
"El presidente no va a esperar a tomar medidas para abordar la crisis de cuidados de nuestra nación", dijo Rice a los periodistas. La orden de Biden tendrá más de 50 acciones ejecutivas, dijo.
La Casa Blanca está apostando a que los programas de cuidado de niños y ancianos, que son muy populares entre el público, pueden aumentar los índices de aprobación de Biden a medida que se acerca el anuncio de su candidatura para la carrera presidencial de 2024.
Biden está dando instrucciones a casi todas las agencias federales para que identifiquen programas de subvenciones que puedan pagar las prestaciones de cuidado infantil y de larga duración para los trabajadores de proyectos federales, y que consideren la posibilidad de exigir a las empresas que soliciten fondos federales para la creación de empleo que amplíen el acceso a los cuidados para sus trabajadores.
El Departamento de Comercio fue pionero en este enfoque el mes pasado, cuando exigió a las empresas que buscaban financiación importante en el marco de su programa de fabricación e investigación de semiconductores en EE.UU., dotado con 52.000 millones de dólares, que mostraran cómo ayudarían a los trabajadores a acceder a un cuidado infantil asequible.
Otras medidas mejorarían el acceso de los veteranos a los cuidados a domicilio, aumentarían la remuneración de los educadores de la primera infancia, mejorarían la calidad de los empleos de cuidado de ancianos y discapacitados y promoverían el derecho de los cuidadores a sindicarse.
Heather Boushey, del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca (CEA), afirmó que la escasez de servicios de cuidado de niños y ancianos y el aumento de los costes limitan la capacidad de muchas mujeres para trabajar, lo que frena el crecimiento económico.
Señaló una reciente previsión del Boston Consulting Group según la cual la producción económica de EE.UU. podría caer en 290.000 millones de dólares al año a partir de 2030 si no se solucionan la escasez y la asequibilidad de los cuidados críticos.
Altos funcionarios de la administración declinaron estimar el valor en dólares de las medidas de Biden y dijeron que la administración quiere aplicar los cambios rápidamente.
