El país balcánico redujo casi a la mitad su previsión de crecimiento para 2022, hasta el 2,6% desde el 4,8%, y la inflación media anual según el índice armonizado de la UE se situó en el 10,4% desde el 5,6% anterior de este año, según las previsiones.

"El conflicto militar provocó un aumento de los precios de la energía y de las materias primas clave, lo que tendrá un impacto negativo en el poder adquisitivo de los hogares", dijo el ministerio en un comunicado.

Se espera que la invasión y las sanciones a Rusia interrumpan el comercio mundial y las cadenas de suministro, lo que perjudicará las exportaciones búlgaras y las inversiones en el país, dijo el ministerio.

Los ingresos del turismo del país también se verán seriamente afectados, ya que es probable que los veraneantes rusos y ucranianos no visiten sus centros turísticos del Mar Negro este año.

El Ministerio de Finanzas prevé que el crecimiento económico se recuperará lentamente hasta alcanzar el 2,8% en 2023. La economía búlgara se expandió un 4,2% el año pasado.

El ministerio espera que los precios al consumo sigan subiendo durante el tercer trimestre y que se ralenticen en el último, con lo que la inflación al final del año será del 10%, que debería bajar aún más hasta el 3,1% en 2023.