El hidrógeno es un combustible bajo en carbono que los responsables políticos esperan que sustituya a los combustibles fósiles utilizados en la industria y en los vehículos pesados.

El Ministerio de Recursos Naturales de Canadá publicó una estrategia federal sobre el hidrógeno en diciembre de 2020, pero utilizó "supuestos poco realistas" para calcular que el combustible limpio podría reducir 45 megatoneladas de emisiones para 2030, según afirmó Jerry DeMarco, comisario de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, en su informe.

El gobierno liberal del primer ministro Justin Trudeau ha prometido reducir para 2030 las emisiones causantes del calentamiento climático al menos un 40% por debajo de los niveles de 2005, lo que supondría una disminución de 293 megatoneladas.

El gobierno canadiense ha calificado el hidrógeno como una parte fundamental de la solución para combatir el cambio climático y quiere que el país se convierta en un exportador a gran escala de este combustible limpio.

DeMarco dijo que la estrategia canadiense sobre el hidrógeno suponía un precio bajo de la electricidad, la adopción de políticas agresivas y a veces inexistentes, y una ambiciosa adopción de nuevas tecnologías.

"En nuestra opinión, los supuestos de la estrategia federal sobre el hidrógeno son demasiado optimistas y comprometen la credibilidad de las reducciones de emisiones previstas", dijo DeMarco en un comunicado.

En contraste con el Ministerio de Recursos Naturales, el Ministerio de Medio Ambiente de Canadá estimó que la tecnología del hidrógeno reduciría 15 megatoneladas de emisiones para 2030.

La auditoría dijo que el gobierno federal debería estandarizar su enfoque para proyectar las reducciones de emisiones y mejorar la calidad y la transparencia de sus modelos climáticos.

La oficina del auditor general también publicó el martes informes sobre otras políticas medioambientales.

Esos informes incluían las conclusiones de que el apoyo del gobierno a los trabajadores afectados por la eliminación gradual de la energía del carbón era inadecuado, y que algunos grupos de la sociedad canadiense estaban siendo impactados desproporcionadamente por un precio federal sobre el carbono.

En una declaración conjunta, los ministerios de Medio Ambiente y de Recursos Naturales de Canadá afirmaron que el gobierno adoptará varias de las recomendaciones del comisario, entre ellas la de estandarizar los cálculos sobre la forma en que medidas como la adopción de hidrógeno reducen las emisiones, y la de garantizar que el precio del carbono sea justo y eficaz.