BARCELONA, 11 sep (Reuters) - Se esperaba que miles de personas celebraran el lunes la Diada Nacional de Cataluña, en un momento en que los partidos separatistas de la región española parecen dispuestos a desempeñar un papel decisivo en la formación de un Gobierno nacional.

En los últimos años, la asistencia a la Diada ha disminuido a medida que se reducía el apoyo a la independencia. Pero con dos partidos catalanes dispuestos a desempeñar un papel en la formación de un nuevo Gobierno, el evento puede impulsar la causa independentista.

"Cataluña tiene la llave de la gobernabilidad del Estado. Pero, la amnistía por sí sola no resuelve el conflicto de la soberanía en el estado. Cataluña quiere votar, libremente, sobre la independencia", dijo el domingo en Barcelona Pere Aragonés, el líder catalán que encabeza Esquerra Republicana Catalana (ERC), el partido separatista de izquierdas más moderado.

El exdirigente regional Carles Puigdemont, que vive en Bélgica, huido de la justicia española por el intento de secesión de hace cinco años, impuso duras condiciones al apoyo de su partido en el Parlamento para que el presidente del Gobierno socialista en funciones, Pedro Sánchez, se mantenga en el poder.

Sánchez necesitaría a los siete diputados del partido Junts per Catalunya de Puigdemont para formar Gobierno tras las elecciones de julio.

La semana pasada, Puigdemont pidió a España que se retiraran las acciones judiciales contra los separatistas, aunque no llegó a exigir una nueva votación sobre la independencia.

Isabel Rodríguez, ministra portavoz del Gobierno en funciones, dijo que España no haría nada que contraviniera la Constitución.

Alberto Núñez Feijóo, cuyo Partido Popular (PP), de tendencia conservadora, fue el más votado el 23 de julio, será el primero en votar para formar Gobierno el 27 de septiembre, pero sus posibilidades son escasas, ya que el PP se opone a cualquier concesión a los separatistas.

En julio, una encuesta publicada por el Centro de Estudios de Opinión de Cataluña (CEO), operado por el Gobierno regional, reveló que el 52% se oponía a separarse de España, mientras que el 42% apoyaba la independencia.

En octubre de 2017, cuando el Gobierno regional separatista de Puigdemont celebró un referéndum declarado ilegal por los tribunales españoles, una encuesta del CEO reveló que el 49% apoyaba la separación de España, mientras que el 43% estaba en contra. Muchos de los que se oponían a la independencia boicotearon el referéndum.

(Reporte de Graham Keeley; Edición de Peter Graff; Editado en español por Flora Gómez)