Por Lingling Wei y Bob Davis THE WALL STREET JOURNAL
Pekín planea presionar a Washington para revertir muchas de las políticas contra China establecidas durante la presidencia de Donald Trump en la primera reunión en persona de altas autoridades estadounidenses y chinas desde la elección del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que se celebrará en Alaska, según fuentes familiarizadas con estos planes.
El encuentro del jueves ofrece a ambas partes la oportunidad de restablecer las complicadas relaciones entre las dos economías más grandes del mundo, que están enfrentadas por cuestiones sobre el desarrollo tecnológico, los derechos humanos, el comercio y el liderazgo militar en Asia.
Las autoridades estadounidenses señalaron que la reunión es una forma de presentar las quejas estadounidenses sobre las acciones chinas, como la reducción de las libertades en Hong Kong, la expansión naval en el mar de China Meridional, la presión económica sobre los aliados estadounidenses, las violaciones de la propiedad intelectual y las incursiones de ciberseguridad. Estados Unidos también pretende tantear a los responsables chinos sobre las formas en las que ambos países pueden trabajar juntos en áreas como el cambio climático y la salud mundial.
China llegará con una agenda diferente que se solapa poco con la de Washington, una señal de lo alejadas que están las dos partes y lo difícil que será reparar la relación.
Yang Jiechi, miembro del Partido Comunista, y el ministro de Asuntos Exteriores, Wang Yi, planean instar al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y al asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan, a que se retiren las sanciones y restricciones sobre las entidades y ciudadanos chinos que fueron establecidas por la Administración Trump, dijeron las fuentes con conocimiento de los planes.
Las autoridades chinas también pretenden proponer el restablecimiento de reuniones de alto nivel entre ambas partes con regularidad y poner fecha a una cumbre virtual entre los líderes, Xi Jinping y Joe Biden, en abril durante una conferencia mundial sobre el cambio climático. La Casa Blanca rechazó hacer comentarios sobre la perspectiva de esta reunión.
Entre las medidas que China quiere revertir se incluyen los límites a las ventas estadounidenses a firmas chinas como la compañía de telecomunicaciones Huawei Technologies Co. y el fabricante de semiconductores Semiconductor Manufacturing International Corp., las restricciones a los visados de los miembros del Partido Comunista y los periodistas de medios estatales, y el cierre del consulado chino en Houston. Pekín ha respondido a estas acciones, con medidas contra entidades y ciudadanos estadounidenses similares.
Si estas restricciones se retiran o relajan, China considerará eliminar su propias respuestas, dijeron las fuentes familiarizadas los planes chinos.
-Escriba a Lingling Wei a lingling.wei@wsj.com y a Bob Davis a bob.davis@wsj.com
Versión española de María Vega Paúl maira.vega@dowjones.com
Editado por NUC
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March 18, 2021 02:48 ET (06:48 GMT)
