Lai Ching-te, del gobernante Partido Democrático Progresista (PDP) de Taiwán, ganó las elecciones presidenciales el sábado, tal y como se esperaba, y tomará posesión de su cargo el 20 de mayo.

En una muestra de apoyo al gobierno, un alto funcionario de la administración dijo la semana pasada que el presidente Joe Biden planeaba enviar una delegación no oficial a la isla reclamada por China. El gobierno de Taiwán rechaza las reivindicaciones de soberanía de Pekín.

El gobierno de Biden ha temido que la elección, la transición y la nueva administración intensifiquen las tensiones con Pekín, que ha presionado militar y económicamente a Taiwán para que haga valer sus reivindicaciones de soberanía.

Al reunirse con Tsai en la oficina presidencial, el ex asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos Stephen Hadley dijo que estaba allí para transmitirle las felicitaciones del pueblo estadounidense por la elección.

"La democracia de Taiwán ha dado un brillante ejemplo al mundo", dijo Hadley, en comentarios difundidos por la oficina de Tsai.

"Nos sentimos honrados de tener la oportunidad de reunirnos hoy con usted para reafirmar que el compromiso estadounidense con Taiwán es sólido como una roca, basado en principios y bipartidista, y que Estados Unidos está con sus amigos", añadió.

Hadley dijo que estaba deseando reunirse con Lai y otros líderes políticos.

"Esperamos que haya continuidad en la relación entre Taiwán y Estados Unidos bajo la nueva administración, y que se hagan esfuerzos comunes para preservar la paz y la estabilidad a ambos lados del estrecho".

China, que nunca ha renunciado al uso de la fuerza para someter a Taiwán a su control, ha criticado a varios países por felicitar a Lai por su victoria electoral, diciendo que no deberían interferir en los asuntos de China.

El gobierno de Taiwán afirma que Pekín no tiene derecho a hablar en nombre del pueblo de la isla ni a representarlo en la escena mundial.