El ministro de Defensa británico, Ben Wallace, y la ministra del Interior, Priti Patel, dijeron que habían sido objeto de ataques. El portavoz de Johnson dijo que también se hizo un intento similar, pero sin éxito, de engañar a la ministra de Cultura, Nadine Dorries.

"Esta es una práctica habitual de las operaciones de información rusas y la desinformación es una táctica sacada directamente del libro de jugadas del Kremlin para intentar distraer de sus actividades ilegales en Ucrania y de los abusos de los derechos humanos que se están cometiendo allí", dijo el portavoz.