El índice de gestores de compras (PMI) del sector manufacturero canadiense de S&P Global se mantuvo sin cambios en junio, igualando el nivel desestacionalizado de 49,3 que se registró en mayo.
Fue el 14º mes consecutivo en el que el PMI se situó por debajo de la marca de 50,0 sin cambios, el tramo más largo de este tipo en datos que se remontan a octubre de 2010. Una lectura por debajo de 50 marca contracción en el sector.
"Los resultados de la economía manufacturera canadiense siguieron siendo flojos en junio", declaró en un comunicado Paul Smith, director económico de S&P Global Market Intelligence.
"Los panelistas señalaron que la demanda subyacente del mercado siguió siendo débil, al tiempo que comentaron que las ventas fueron quizá más débiles de lo esperado, lo que provocó la acumulación de cierto exceso de inventario en sus fábricas."
La medida de nuevos pedidos se situó en 48,2, sólo ligeramente por encima de los 48,1 de mayo, mientras que la medida de empleo entró en contracción por primera vez desde enero, cayendo a 49,2 desde 50,3.
Un punto positivo en los datos fue una relajación de las presiones de los costes, con el índice de precios de los insumos cayendo hasta 53,6, su nivel más bajo desde enero, desde 53,8 en mayo.
"Un aspecto positivo de la última encuesta es que las presiones sobre los precios parecen ampliamente contenidas, con los costes subiendo a un ritmo más suave que en los últimos meses y las cargas aumentando sólo modestamente", dijo Smith.
"Sin embargo, el limitado poder de fijación de precios es en general una función de la débil demanda y un mercado competitivo, y con las empresas señalando que los precios siguen siendo demasiado altos para muchos clientes, la confianza en el futuro se ha suavizado posteriormente a su nivel más bajo del año hasta ahora."
La medida de la producción futura cayó a 60,1 desde 62,1 en mayo, marcando la lectura más baja desde diciembre. (Reportaje de Fergal Smith; Edición de Chizu Nomiyama)
