Yibuti era la primera escala del viaje de tres días de Baerbock a África Oriental, donde tiene previsto mantener conversaciones sobre el actual conflicto en Sudán. Kenia y Sudán del Sur son los siguientes destinos en la agenda.

En una declaración, Baerbock dijo que la parada no prevista era un reflejo de la inestabilidad general de la región, ya que los países cercanos, Sudán y Yemen, no podían utilizarse como rutas de paso debido a los conflictos armados que allí se desarrollan.

Añadió que había planeado transmitir en Yibuti el mensaje de que Alemania y la Unión Europea estaban trabajando en formas de proteger las rutas marítimas del Mar Rojo de los ataques de la milicia Houthi de Yemen.

"Se trata de una misión de protección de los buques de la región, y eso significa que una misión defensiva de este tipo por parte de los europeos, en caso de que se acuerde, no constituiría un ataque a Yemen", declaró.

El pasado agosto, el viaje de una semana que Baerbock tenía previsto realizar a la región Indo-Pacífica tuvo que ser cancelado debido a repetidos problemas mecánicos con su avión gubernamental.