El dólar subió el viernes frente a las principales divisas, pero seguía encaminado a una caída semanal, mientras continúan las especulaciones en el mercado sobre el calendario de recortes de tipos de la Reserva Federal, en medio de señales de enfriamiento de la inflación y de un debilitamiento de la economía estadounidense.

Los datos del miércoles mostraron que los precios al consumo subieron más despacio de lo esperado en abril, pero varios responsables políticos han dado pocas pistas sobre cuándo podrían bajar los tipos, lo que ha limitado los descensos del dólar esta semana.

El índice dólar -que sigue al billete verde frente a seis pares- subió un 0,2% el viernes, hasta 104,74, pero seguía en camino de registrar un descenso semanal de alrededor de medio punto porcentual.

Los mercados de futuros están valorando actualmente en 47 puntos básicos los recortes de tipos de la Reserva Federal para finales de este año.

"Los comentarios de esta semana de los funcionarios de la Fed fueron, en nuestra opinión, todavía indicativos de una Fed que estaría dispuesta a girar y recortar relativamente rápido si se dispone de pruebas que lo respalden", dijeron los analistas de divisas de MUFG en una nota.

Aunque los mercados prevén recortes de los tipos europeos a partir de junio, los datos recientes han mostrado algunas sorpresas al alza. La economía alemana creció más de lo previsto el trimestre pasado y la moral de los inversores se encuentra en máximos de dos años.

Los datos de inflación al consumo de la zona euro del viernes se situaron en el 2,4% interanual en abril, en línea con una encuesta de Reuters.

El euro bajó un 0,2% en la jornada, hasta 1,084325 dólares. Esta semana sigue subiendo alrededor de un 0,7% frente al dólar.

Los responsables políticos de la zona euro han aumentado su confianza en que la inflación vuelva a situarse en el objetivo el año que viene debido a la relajación de las presiones sobre los precios, según declaró el viernes el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos.

Los decepcionantes datos chinos del viernes ayudaron a mantener bajo control el sentimiento de riesgo del mercado. La producción industrial superó las previsiones, pero las ventas minoristas se ralentizaron y los precios de la vivienda cayeron a su ritmo más rápido en más de nueve años.

La libra esterlina retrocedió un 0,2% hasta los 1,2649 dólares. El dólar ganó un 0,3% frente al yen japonés y se situó en 155,9.

En los mercados de criptodivisas, el bitcoin subió un 1,5% hasta los 66.262 dólares.