El euro cayó cerca de un 1% hasta 1,0108 dólares durante la noche, la mayor caída desde el 11 de julio, y se mantuvo estable en las primeras operaciones de Asia en 1,0139 dólares. El crecimiento de Europa sigue siendo vulnerable al suministro de gas ruso, que se ha convertido en un riesgo importante desde el inicio de la guerra de Ucrania.
Los flujos a lo largo de la tubería Nord Stream, que va de Rusia a Alemania, cayeron el martes y bajarán aún más el miércoles.
"Es probable que el suministro de energía siga siendo una cuestión clave para la economía europea en los próximos meses", dijo Kristina Clifton, estratega de divisas del Commonwealth Bank of Australia. "El euro puede cotizar por debajo de la paridad, más que brevemente (y) más pronto que tarde".
En otros lugares, los movimientos han sido moderados antes del anuncio de la política de la Reserva Federal, previsto para las 1800 GMT. El yen se mantuvo estable en 136,98 por dólar. El dólar australiano y el neozelandés subieron ligeramente en las primeras operaciones, pero se mantuvieron por debajo de los máximos del martes. La libra esterlina rondó los 1,2048 dólares.
Los analistas dijeron que el dólar australiano podría subir si los datos de la inflación que se publicarán a la 0130 GMT sorprenden al alza. Se espera que la inflación general alcance un máximo de tres décadas del 6,2%. El dólar australiano subió un 0,2% a 0,6950 dólares y el kiwi subió un 0,2% a 0,6243 dólares.
Los mercados han descontado una subida de la Fed de 75 puntos básicos más tarde el miércoles, con un 13% de posibilidades de una subida de 100 puntos básicos.
La atención se centrará también en la conferencia de prensa de las 1830 GMT en busca de cualquier indicio de que la decisión de los responsables políticos de subir más el tipo de interés está disminuyendo a medida que el crecimiento se ralentiza.
"Se trata más bien de esperar y ver que de esperar una gran sorpresa", dijo Galvin Chia, estratega de mercados emergentes de NatWest Markets.
Espera que el dólar estadounidense siga apoyado por los flujos de refugio seguro a largo plazo, en medio de un panorama mundial cada vez más sombrío.
Los datos de la noche mostraron que la confianza de los consumidores estadounidenses cayó a un mínimo de casi un año y medio y que las ventas de viviendas nuevas se desplomaron, mientras que las acciones de Walmart cayeron después de que el minorista emitiera una advertencia de beneficios.
La semana pasada, los datos manufactureros europeos fueron poco favorables.
"Los riesgos a la baja para el crecimiento de la eurozona y las preocupaciones más amplias sobre el crecimiento a nivel mundial tienden a sugerir una mayor fortaleza del dólar", dijo Chia.
El índice del dólar estadounidense se situó en 107,08, no muy lejos del máximo de 20 años alcanzado a mediados de julio, 109,290. Ganó un 0,64% durante la noche, rompiendo tres sesiones consecutivas de descensos.
