El Gobierno británico está estudiando la posibilidad de que el Estado se haga cargo temporalmente de la empresa, que abastece a una cuarta parte de los hogares británicos, si no consigue recaudar más fondos para impulsar su cambio de rumbo.
Hemos dado nuestro respaldo al plan de reconversión de Thames Waters y a su hoja de ruta Net Zero y nos comprometemos con ellos regularmente para apoyar su estrategia a largo plazo, declaró el viernes el consejero delegado del grupo USS, Bill Galvin, en una nota a sus patronos patrocinadores.
Seguimos siendo de la opinión de que, con un entorno normativo adecuado, el objetivo a largo plazo de reparar las importantes infraestructuras del Reino Unido y pagar las pensiones a nuestros afiliados están muy alineados, afirmó.
Thames Water está luchando con 14.000 millones de libras (17.800 millones de dólares) de deuda y no ha logrado cumplir los objetivos medioambientales y de clientes, incluido el de frenar el flujo de aguas residuales sin tratar a los ríos.
Su dirección había pedido a los accionistas una inyección de capital de 1.000 millones de libras para reforzar su balance y financiar la necesaria modernización de unas infraestructuras envejecidas.
Entre sus otros propietarios se encuentran Ontario Municipal Employees Retirement System y China Investment Corp.
USSs Galvin dijo que el enfoque diversificado de inversión del grupo significaba que no esperaba que los acontecimientos en torno a Thames Water tuvieran un impacto material en la posición de financiación o en los tipos de cotización que salieran de su valoración de 2023, ni en la seguridad de las pensiones de los afiliados.
(1 $ = 0,7876 libras) (Reportaje de Carolyn Cohn; Redacción de James Davey; Edición de Daniel Wallis)