Estados Unidos tiene información que indica que el gobierno de transición de Mali ha pagado más de 200 millones de dólares a Wagner desde finales de 2021, dijo a la prensa el portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Kirby.

Kirby dijo que el líder del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, ayudó a urdir la salida de la fuerza de mantenimiento de la paz de Naciones Unidas, conocida como MINUSMA, "para favorecer los intereses de Wagner".

"Sabemos que altos funcionarios malienses trabajaron directamente con empleados de Prigozhin para informar al secretario general de la ONU de que Mali había revocado el consentimiento para la misión MINUSMA", dijo Kirby.

El Consejo de Seguridad de la ONU votó el viernes el fin de la misión. A principios de este mes, Mali pidió a la fuerza de paz de la ONU que se marchara "sin demora", citando una "crisis de confianza" entre las autoridades malienses y la misión de la ONU, que dura ya una década.

Dos días antes, el presidente interino del país, el coronel Assimi Goita, dijo en Twitter que estaba muy satisfecho de la llamada telefónica que había mantenido con el presidente ruso, Vladimir Putin, que calificó de "directa y sincera".

Kirby dijo que a pesar del dinero pagado por Mali al Grupo Wagner, que hace una semana lanzó un motín armado abortado en Rusia, la situación de seguridad en el país no ha mejorado.

Dijo que Washington no había visto ningún indicio de que Wagner estuviera disminuyendo su intención de explotar a los países africanos, "a pesar de los acontecimientos del pasado fin de semana".

Tanto Rusia como Mali han dicho que los combatientes rusos allí no son mercenarios sino entrenadores que ayudan a las tropas locales a luchar contra una insurgencia de militantes islamistas que dura ya una década.

Los líderes de Mali tomaron el poder en un golpe de Estado en 2021 y trajeron a Wagner tras pedir a una misión militar francesa que se marchara.