Un crecimiento económico más fuerte es clave para estabilizar la creciente deuda pública británica, afirmó el martes la agencia de calificación crediticia S&P Global, en su primer comentario sobre el nuevo gobierno laborista desde su victoria en las elecciones de la semana pasada.

S&P dijo que, con la previsión de que el ratio deuda/PIB del Reino Unido alcance el 100% el próximo año, se esperaba que el gobierno mantuviera el compromiso de reforzar las finanzas públicas para reducir lentamente ese ratio.

S&P califica actualmente al Reino Unido en AA con perspectiva "estable", lo que supone un escalón por encima de las otras principales agencias de calificación, Moody's y Fitch.