El presidente de Kenia, William Ruto, habló por teléfono con la jefa del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, en los días posteriores a que retirara 2.700 millones de dólares en subidas de impuestos propuestas en respuesta a las mortíferas protestas, según dijeron a Reuters dos fuentes diplomáticas.

El proyecto de ley de finanzas que contenía las subidas de impuestos era fundamental para las reformas políticas acordadas por Kenia con el FMI como parte de un programa de préstamos por valor de 3.600 millones de dólares.

Según los analistas, es probable que su retirada hace una semana haga que Kenia incumpla objetivos clave del programa.

El FMI ha sido uno de los principales objetivos de la ira de los jóvenes manifestantes keniatas, que lo han acusado de ser la fuerza impulsora de las subidas de impuestos propuestas.

Las dos fuentes, que hablaron bajo condición de anonimato, no dieron detalles sobre la llamada telefónica de Ruto y Georgieva.

Sin embargo, dijeron que había acuerdo entre los principales donantes en que el FMI necesitaba mostrar flexibilidad en los objetivos del programa mientras Kenia intentaba llenar el vacío causado por la retirada del proyecto de ley.

El FMI llegó a un acuerdo a nivel de personal con Kenia a principios de junio sobre un paquete de políticas necesario para completar la séptima revisión del programa de préstamos, que se espera desbloquee un desembolso de varios cientos de millones de dólares, pero el acuerdo aún no ha recibido la aprobación de la Junta Ejecutiva del fondo.

Un portavoz del FMI declaró: "Seguimos profundamente preocupados por los trágicos acontecimientos ocurridos recientemente en Kenia y mantenemos un estrecho diálogo continuo y constructivo con las autoridades keniatas", cuando se le preguntó por la llamada.

El portavoz de Ruto no respondió a las peticiones de comentarios.

Desde que archivó el proyecto de ley, Ruto ha prometido incluir medidas de austeridad en un presupuesto suplementario, pero también ha sugerido que el gobierno necesitará aumentar significativamente el endeudamiento en el año fiscal 2024/25.

Un portavoz del FMI declaró la semana pasada que su principal objetivo ha sido ayudar a Kenia a superar sus retos económicos y mejorar el bienestar de su población.

Al menos 39 personas han muerto en las protestas, según una organización de derechos humanos financiada por el gobierno. Las manifestaciones antigubernamentales han continuado desde que Ruto retiró el proyecto de ley, aunque con menor participación. (Reportaje adicional de Karin Strohecker; Edición de Alexander Smith)