"Los recortes de los tipos de interés no son fáciles ni siquiera para la segunda mitad del año", dijo Lee Seung-heon, antiguo número 2 del banco, en una entrevista con Reuters. "No es que la economía esté en clara cuesta abajo y no hay necesidad de apresurarse a un recorte sólo porque el impulso (de crecimiento) no sea tan robusto".
Lee, que se jubiló en agosto, habló antes de la revisión de los tipos de interés del banco central el viernes y mientras el won cotizaba en torno a los 1.350 por dólar, no lejos de los mínimos de este año.
Sus comentarios desafían las predicciones de los analistas, sostenidas desde hace tiempo, de recortes de 25 puntos básicos tanto en el tercer como en el cuarto trimestre para reducir el tipo de interés de referencia al 3,00% a finales de este año desde el 3,50% actual.
El BOK ha realizado un total de 300 puntos básicos de subidas desde mediados de 2021.
Los responsables políticos tendrán que esperar al menos hasta junio para dar a los mercados alguna señal sobre posibles recortes, ya que la subida de los precios mundiales del petróleo amenaza con aumentar bruscamente las presiones sobre los precios y porque hay que seguir examinando la fortaleza del consumo interno, dijo.
De hecho, los últimos datos mostraron que la inflación general se mantiene estable.
El índice de precios al consumo (IPC) avanzó un 3,1% en marzo respecto al año anterior, el mismo ritmo que en febrero tras tres meses de relajación, lo que avivó las opiniones de que aún es demasiado pronto para que el BOK se plantee una relajación.
El objetivo de inflación del BOK está fijado en el 2%.
Lee, actualmente profesor de la Universidad Soongsil, se abstuvo de especificar un plazo para cuando los funcionarios puedan reducir los costes de los préstamos.
"Veremos algo de claridad sobre el curso de la economía en junio, pero yo digo que los datos económicos probablemente darán a los funcionarios más razones para esperar".
En una conferencia de prensa celebrada en febrero, el gobernador del BOK, Rhee Chang-yong, reveló que uno de los siete miembros de la junta quería que la puerta para un recorte de los tipos permaneciera abierta durante los próximos tres meses. Eso había llevado a los inversores a apostar por un recorte a corto plazo.
En el pasado, el BOK ha tendido a recortar los tipos a los pocos meses de un voto en contra.
