Los despliegues en Polonia y Rumanía están por encima de los 8.500 soldados estadounidenses que el Pentágono puso en alerta el mes pasado para estar preparados para desplegar en Europa si fuera necesario.

En conjunto, las maniobras pretenden tranquilizar a los nerviosos aliados de la OTAN ante la importante acumulación militar rusa cerca de Ucrania, al tiempo que evitan nuevos despliegues estadounidenses en la propia Ucrania, que no forma parte de la OTAN pero sí recibe armas y entrenamiento de Estados Unidos y sus aliados.

Los despliegues de Biden también podrían señalar una voluntad de tomar medidas militares más proactivas mientras la acumulación de Rusia continúa a pesar de los esfuerzos en curso para desactivar la crisis diplomáticamente.

"Es importante que enviemos una señal fuerte al Sr. Putin y, francamente, al mundo de que la OTAN importa a Estados Unidos e importa a nuestros aliados", dijo el portavoz del Pentágono, John Kirby, en una sesión informativa, refiriéndose al presidente ruso Vladimir Putin.

Un escuadrón Stryker de fuerzas de infantería mecanizada compuesto por unos 1.000 miembros del servicio estadounidense con base en Vilseck, Alemania, será enviado a Rumanía, dijo el Pentágono. El Pentágono también dijo que alrededor de 1.700 miembros del servicio, principalmente de la 82ª División Aerotransportada, se desplegarán desde Fort Bragg, Carolina del Norte, a Polonia, y otros 300 miembros del servicio se trasladarán desde Fort Bragg a Alemania.

El Pentágono dejó abierta la posibilidad de que se produzcan más despliegues estadounidenses además de los anunciados el miércoles. Señaló la voluntad, y la necesidad, de hacer más para prepararse para un posible conflicto en Europa.

"No puedo ser perfectamente predictivo sobre cómo va a ir esto, y es precisamente porque no podemos ser perfectamente predictivos que queremos estar preparados", dijo Kirby.

Los 8.500 soldados estadounidenses a los que se les notificó la semana pasada las órdenes de estar listos para el despliegue incluían equipos de combate de brigada adicionales, personal logístico, apoyo médico, apoyo de aviación y fuerzas que participan en misiones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento.

Serían activados por la OTAN, si surge la necesidad, según el Pentágono.

Rusia niega estar planeando una invasión. Pero, después de haber diseñado la crisis actual rodeando a Ucrania con fuerzas del norte, el este y el sur, Moscú cita ahora la respuesta occidental como prueba para apoyar su narrativa de que Rusia es el objetivo, no el instigador, de la agresión.

Rusia, que arrebató Crimea a Ucrania en 2014 y respalda a los rebeldes prorrusos que luchan contra las fuerzas gubernamentales en el este de Ucrania, exige amplias garantías de seguridad, incluida la promesa de que la OTAN nunca admitirá a Ucrania.

Estados Unidos ha desestimado tales peticiones, diciendo que dependerá de Ucrania y de la OTAN si Kiev se une alguna vez a la alianza.

Kirby mantuvo la esperanza de que Putin opte finalmente por una solución diplomática a la crisis.

"Todavía no creemos que haya tomado la decisión de seguir invadiendo Ucrania", dijo Kirby.