Filipinas se encuentra en las últimas fases de un proyecto de cinco años y 300.000 millones de pesos (5.850 millones de dólares) para modernizar el anticuado hardware de su ejército, que incluye buques de guerra de la Segunda Guerra Mundial y helicópteros utilizados por Estados Unidos en la Guerra de Vietnam.

Según el acuerdo negociado con el gobierno de la India, Brahmos Aerospace Private Ltd entregará tres baterías, formará a los operadores y a los encargados del mantenimiento y proporcionará apoyo logístico, dijo el secretario de Defensa, Delfín Lorenzana, en un post de Facebook a última hora del viernes.

Fue conceptualizado en 2017, pero se enfrentó a retrasos en la asignación presupuestaria y debido a la pandemia de coronavirus.

El nuevo sistema antibuque pretende disuadir a los buques extranjeros de invadir la zona económica exclusiva de 200 millas náuticas del país.

En 2018, Filipinas compró misiles Spike ER de fabricación israelí, su primer sistema de misiles a bordo para la disuasión marítima.

A pesar de los lazos más amistosos entre China y Filipinas bajo el mandato del presidente Rodrigo Duterte, Pekín se ha mantenido firme en la reclamación de grandes porciones del Mar de China Meridional, un conducto de mercancías que supera los 3,4 billones de dólares cada año. Brunéi, Malasia, Filipinas, Taiwán y Vietnam también han presentado reclamaciones contrapuestas.

Sin embargo, un fallo de arbitraje internacional de 2016 dijo que las reclamaciones chinas no tenían base legal.

(1 dólar = 51,31 pesos filipinos)