Lo desestimó las preocupaciones sobre la medida propuesta por ser impopular entre los residentes de Hong Kong, argumentando que mejoraría las libertades de los residentes no infectados, dijo el periódico citando los comentarios del secretario de sanidad en un programa de televisión.

El informe no decía qué implicaría el código sanitario.

Desde el inicio del COVID-19, las localidades de toda China han utilizado códigos sanitarios marcados con colores para conceder a las personas el acceso al transporte público, a los hoteles y a otros servicios básicos, utilizando trackers de localización y otros datos para evaluar la exposición al virus.

El Departamento de Salud de Hong Kong no respondió inmediatamente a la solicitud de comentarios de Reuters.

Hong Kong ha intentado emular el enfoque chino de "COVID dinámico cero". Pero, a diferencia del continente, el territorio de Hong Kong, que alberga a más de 7 millones de personas, sigue dependiendo en gran medida de los viajes y los negocios internacionales.

La semana pasada, Hong Kong suspendió una norma que prohibía los vuelos individuales por traer pasajeros infectados con el virus COVID-19, ya que causaba "problemas innecesarios" y molestias a los residentes del centro financiero mundial.